Los textiles con lana, son una de las más de 40 sub ramas artesanales con las que cuenta el Estado de México, prendas hechas de forma manual que “combinan” con el invierno debido a su propiedades, señalan artesanos mexiquenses.
Uno de los que mantiene dicha tradición en la entidad es Ismael Pulido, originario de Gualupita; en Santiago Tianguistenco, ha realizado diferentes prendas por más de dos décadas, misma que señala, tiene propiedades térmicas.
Prendas fabricadas por artesanos mexiquenses
“Para estas épocas de frío lo más recomendable es una prenda térmica, porque cubre más, protege más y yo trabajo lo que es el suéter, chaleco y ya también algunas cosas con el telar de pedal.
El material que utilizó es lana natural y teñida, se puede hacer con sintéticos, pero lo tradicional es la lana natural, que es parte de lo prehispánico, porque la lana viene de milenios atrás, a parte de eso la la es algo térmico y anti estrés”, dijo el artesano.
La lana, debe prepararse antes de convertirse en una prenda, a través de lavados y tejidos el artesano ve cómo se transforma la materia prima, siempre cuidando los tejidos, que son los que determinarán su calidad.
“Se prepara lavándola, se echa a remojar, se tiene que lavar perfectamente, para dar mejor calidad. Las prendas se deforman cuando están muy abiertos los tejidos.
Para esto se utiliza un bastidor, un gancho y un buril, esas son las herramientas para poder trabajar y todo lo demás es la creatividad, todo se plasma en un cuadriculado, por si nos equivocamos poder corregir” señaló Pulido.
Toda su creatividad queda plasmada en las prendas
Explicó que los bastidores pueden anchos o angostos, lo que determina que tan cerrados del van formando los tejidos en lana, a cada uno se le van agregando grecas o figuras, que tienen simbología retomada de la época prehispánica.
“Dependiendo de los diseños se utiliza la técnica, el bastidor debe ser un poco más cerrado, para hacer un trabajo más fino, no se traspasa, en el bastidas abierto sí, se traslucen los dedos y eso hace que el suéter sea de menor calidad”, dijo el productor de prendas.
Con la calidad, aumentan los hilos que se deben utilizar elaborar algún producto, y con ello, el tiempo que le toma al artesano terminarlo; mencionando que puede tardar hasta 15 días en dar la última “pasada” al bastidor para un solo suéter.
Sin embargo; menciona que esto permite a los artesanos generar innovaciones en sus diseños
“Creo que en esto como en cualquier cosa que uno venda se debe de tratar innovar para llamar a la gente, en este caso yo hago algunas diseños; por ejemplo, de Frida Kahlo, grecas que no se han visto se van innovando cada una con su proceso”, apuntó Pulido.
De acuerdo con el Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías del Estado de México (IIFAEM), los artesanos textiles son los de mayor registro dentro de su padrón, con 22,276, en el que los hombres representan la minoría, con 4,466.
SPM