El temazcal es un ritual de arraigo en la comunidad mazahua del Estado de México, mismo que se ha vuelto un atractivo turístico; sin embargo, la connotación de esta actividad está cargado de cosmogonía y tradición que da identidad a mexiquenses y mexicanos como una herencia de los pueblos originarios.
Alejandro Treviño, temazcalero de la entidad, señala que esta actividad es una forma de conocer de primera mano nuestro pasado, como si el temazcal hubiera sido guardado en una cápsula del tiempo manteniéndose intacto hasta nuestra época.
“Esta tradición implica todo lo que es nuestra herencia ancestral nuestro pasado tangible e intangible este parte de la tradición se sostiene a través de las historias de la tradición oral lo que se ha ido difundiendo a través de los pueblos, las comunidades y el arraigo”, dijo Treviño.
Así se realiza el ritual
Detalló que el ritual se basa en la purificación del cuerpo y el pensamiento a través de una ceremonia que involucra diferentes elementos, asimismo, señaló que estos rituales eran también de uso político en la época prehispánica.
“Se sostiene de muchos elementos tanto culinarios como ideológicos, se sustenta en una cosmogonía y tiene ciertos ritos encaminados a purificar nuestro cuerpo, nuestro pensamiento, esto es parte de esos rituales que se han venido transmitiendo de generación en generación.
Ahora mucho se se habla del temazcal de purificación ,el temazcal de relajación; inclusive, pero también se utilizaba el el temazcal con fines políticos”, comentó.
Enfatizó que en los estos rituales hay ciencias aplicadas que son un legado tras la caída de Tenochtitlán, hace 502 años, mismos que permanecen intactos al momento de llevar a cabo cada procesos, lo que fomenta la identidad con los pueblos originarios y la revalorización con nuestra “raíces”.
Explicó que el ritual se realiza con el debido respeto a los elementos de la naturaleza involucrados, desde el cielo a las piedras, a quienes piden permiso para realizar la ceremonia.
“Saludamos a los rumbos con el Atecocolli, que es el caracol, con los tambores, el sahumador, pedimos permiso a cada uno. Empezamos desde el este, donde sale el sol; giramos hacia el sur, al poniente y al norte. Después saludamos a la bóveda celeste y a nuestra madre tierra, se ahuma la leña, las abuelitas piedras y el círculo donde se va a desarrollar la la ceremonia.
Temazcal, un ritual de identidad
En este círculo anterior puede haber también cantos, al abuelo fuego le gustan mucho los cantos y el rezo. Se les da ofrenda, es muy importante; con tabaco y antes de entrar ahumamos a cada uno de los hermanos que vayan a pasar”, detalló el temazcalero.
Finalmente señaló que esta actividad es valiosa, porque pretende ayudar a la introspección a través del pensamiento y relajación del cuerpo, buscando el renacimiento personal en cada experiencia.
“Creo que algo muy importante y valioso del temazcal es que es un encuentro contigo mismo y pues hasta paradójicamente con el todo, entonces es permitirte esa dualidad de vida y muerte, entrar a morir; que es trabajar lo que se tiene que trabajarse y renacer no como un ser nuevo, mejor”, concluyó.
De acuerdo con el gobierno del Estado de México, los municipios donde más se practican estos rituales son: Acolman, Malinalco, Ixtapan de la Sal, Temascalapa, Teotihuacan y San Martín de las Pirámides.
TAR