La contienda electoral en el Estado de México ha llegado a su punto culminante. Alejandra Del Moral, abanderada de la coalición “Va por el Estado de México”, conformada por el PRI, PAN, PRD y Nueva Alianza, se enfrenta a Delfina Gómez, representante de la coalición “Juntos hacemos historia en el Estado de México”, conformada por Morena, PT y Verde Ecologista. El próximo domingo 4 de junio, los ciudadanos mexiquenses tendrán la responsabilidad de elegir a quien consideren la mejor opción para gobernar su entidad.
Aunque también se llevan a cabo elecciones en Coahuila, es el Estado de México el que ha captado la atención nacional. Un posible triunfo del PRI en esta contienda significaría un hito histórico, ya que el partido alcanzaría el récord de gobernar una entidad por más de 100 años. Por otro lado, una derrota prácticamente marcaría la desaparición del priismo, poniendo en tela de juicio su futuro como fuerza política otrora poderosa.
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Es destacable que, en esta ocasión, dos mujeres encabezan alianzas partidistas, lo cual constituye un hecho inédito. Sin embargo, la ausencia de Movimiento Ciudadano, representado por Juan Zepeda, quien había sido candidato a gobernador por el PRD en 2017, genera una polarización política en el panorama electoral.
Alejandra Del Moral se enfrenta a una de las elecciones más reñidas en la historia del PRI. A diferencia de la contienda de 2018, en la cual Alfredo Del Mazo obtuvo la victoria con el respaldo de sus aliados, en esta ocasión las encuestas muestran resultados fluctuantes y una competencia difícil. A pesar de partir con una desventaja considerable, Alejandra ha logrado acortar la brecha, aunque el resultado final aún está en el aire.
En los últimos tres años, hemos sido testigos del “efecto López Obrador”. Los votos de Morena se han multiplicado de manera significativa, pasando de poco más de medio millón en 2015 a más de 3 millones en 2018. En las elecciones municipales, Morena ha conquistado el gobierno de 27 municipios importantes, mientras que el PRI ha perdido terreno, pasando de gobernar 84 municipios en 2015 a solo 21.
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Sin embargo, en las elecciones de 2021, el PRI, bajo el liderazgo de Alejandra del Moral, logró una recuperación considerable al ganar en 48 municipios, mientras que el PAN se mantuvo en 19 y Morena solo perdió uno.
Es importante señalar que los municipios que el PRI recuperó fueron aquellos previamente gobernados por el aliado de Morena, el PT, con 26 municipios bajo su gobierno.
Para evitar la debacle del PRI, se destacan algunos personajes clave en la campaña. Ana Lilia Herrera Anzaldo, la segunda diputada federal más votada del país, se presenta como una hábil operadora política. Además, los exgobernadores priistas, como Emilio Chuayffet, César Camacho Quiroz, Arturo Montiel, Eruviel Ávila y el propio Enrique Peña Nieto, quien, aunque no esté ni se vea, está y con mucho peso e influencia en las decisiones más relevantes.
Se habla de un acuerdo entre el gobernador Alfredo Del Mazo y el presidente Andrés Manuel López Obrador de no intervención. Si bien no se puede confirmar, es evidente que
las candidatas han evitado confrontaciones directas con los gobiernos federal y estatal. ¿Qué tanto influirá? Ya se verá. Por lo pronto, hay que ir a votar.