El Estado de México cuenta con 2 mil hectáreas destinadas a las producción de cempasúchil, terciopelo, nube y alhelí, la primera representa cerca de 5 por ciento de la producción total con 95 hectáreas para su producción.
Esto representa un aumento respecto al año pasado cuando se reportaron 90 hectáreas destinadas a la cosecha de flores de cempasúchil para fines comerciales, lo que se tradujo en 132 mil manojos y un valor productivo superior a los 6.7 millones de pesos.
En el Estado de México se produce como manojo a cielo abierto, principalmente en los municipios de Texcoco, Tenancingo, Ozumba, Chicoloapan, Tepetlixpa, Chimalhuacán y Malinalco, afirmó la secretaria del Campo, María Eugenia Valdés.
Hectáreas destinadas a las producción de cempasúchil
Precisó que la entidad ocupa el segundo lugar a nivel nacional en producción de esta flor, con un precio promedio de entre 60 pesos y 80 pesos por manojo directamente con el productor-
“Para festividad de muertos, el principal es cempasúchil, ocupamos el segundo lugar, medidas manojos, fresas, macetas, en este caso prevemos una derrama de mil 65 millones de pesos, espero que tengamos esas condiciones”.
Consideró que es prioritario trabajar de la mano de los pequeños productores e impulsar programas especiales, sin dejar afuera a medianos y grandes productores que permiten mantener a la entidad en los primeros lugares.
Uso tradicional de la flor
El día de muertos implica el regreso de las ánimas de los difuntos, quienes regresan a casa para convivir con sus familiares, los pétalos de la flor de cempasúchil, por su color, representa la luz del sol que guía a los muertos en los altares puestos en su honor.
La tradición marca hacer senderos con pétalos de cempasúchil, desde la entrada principal hasta el altar de la casa donde se recibe a las almas con un banquete en el que se colocan los alimentos y objetos favoritos del difunto.
La flor de cempasúchil también se usa con fines medicinales, principalmente para el tratamiento de padecimientos digestivos, fiebre e incluso enfermedades respiratorias como la tos.
De igual forma se obtiene para adquirir colorante natural para teñir objetos, prendas o alimentos, en la avicultura suele usarse para alimentar a las aves con el fin de que su piel y la yema de los huevos aumenten su coloración amarilla, también es la materia prima para elaborar cervezas artesanales, nieves o pulque.
SPM