El Instituto Nacional Electoral por segunda ocasión determinó retirar las candidaturas de Félix Salgado Macedonio y Raúl Morón a las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, respectivamente, por no reportar gastos de precampaña. Aunque el marcador va 2-0 a favor del INE, se pronostican tiempos extras con las impugnaciones correspondientes.
Y estos casos que por supuesto competen al interés de los guerrenses y michoacanos; pero eclipsan todo el espectro político nacional por las declaraciones y acciones que se han expresado y realizado en los días recientes.
Sin duda la resolución del INE sienta un precedente; y se espera que de todo esto el árbitro pueda salir fortalecido porque la campaña federal apenas inicia y no será sano estar inmersos en esas espirales que lo desgastan.
Un tema de aplicación de la ley ha derivado en fricciones verbales entre los protagonistas: un grupo de consejeros electorales que por observar y atender la norma recibe dardos lanzados por el partido en el poder y desde el poder mismo.
Y esto aletarga el desarrollo de las campañas políticas en un escenario de por sí complejo con la pandemia del Covid-19 que impide realizar actos y reuniones.
Sin duda el tema de Guerrero y Michoacán continuará dando de qué hablar y no se agotará con la elección, ya que no se descartan más adelante reformas legales promovidas desde el mismo Ejecutivo para no padecer otra vez en el futuro un episodio de esta naturaleza.
Mientras, la campaña a diputados federales sigue y luego, en el caso del Estado de México, arrancarán las contiendas por los ayuntamientos y diputaciones federales; por lo que el tráfico de mensajes por todas las vías se incrementará.
Al analizar el proceso electoral 2021 en Twitter entre el periodo del primero al 7 de abril, previo y en el arranque de las campañas federales en el país, la consultora Metrics observó un total de dos millones 640 mil 883 publicaciones relacionadas con partidos políticos.
Y es precisamente en dicho análisis en donde se puede comprobar que todo el entorno de confrontación que se vive y el sainete en las acciones y los dichos acarrea percepción negativa a los institutos políticos.
Tan es así que en ese estudio se registró que todos, partidos o coaliciones, arrastran negativos superiores al 50 por ciento.
Morena, el Partido del Trabajo y Encuentro Social traen una actitud negativa del 74 por ciento y un 26 por ciento positiva; la coalición Va por México integrada por el PRI, PAN y PRD arrastra un 69 por ciento de actitud negativa y 31 por ciento positiva.
El PRI por si mismo acarrea una actitud negativa del 90 por ciento y 10 por ciento positiva; el PRD una negativa del 52 por ciento y 48 por ciento positiva y Movimiento Ciudadano un 67 por ciento negativa y 33 por ciento positiva.
Ante ese escenario de saturación será interesante ver si las candidatas y los candidatos logran diferenciarse con sus estrategias en medio de lo que se avecina será un exceso de propaganda sin descartar que se pueda presentar lo que podría definirse como una infodemia electoral.
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ASME
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