En una fusión de tradición y arte monumental, la Tlanchana, figura emblemática de la cosmovisión metepequense, es la encargada este año de custodiar la tradicional ofrenda monumental que se ha colocado en las escalinatas del Cerro del Calvario a través de una pieza de cartonería de más de 6 metros de alto.
Tlanchana, figura emblemática de la cosmovisión metepequense
La pieza central de la ofrenda monumental de Día de Muertos de Metepec es una escultura de 6.5 metros de altura, creada con técnicas de cartonería, que celebra y rescata el mito de la sirena con cola de serpiente, figura mítica profundamente arraigada en la cultura de Metepec. A través de esta pieza, Óscar Bellonset, artesano cuatro veces ganador del Concurso de Judas, resalta la tradición mexicana y la identidad local.
“Me dieron mucha libertad creativa. Yo hice la propuesta de la tlanchana, les mandé el diseño y la maqueta, y no modificaron nada; al final se tomó la idea original.
La tlanchana se me vino a la mente por los mitos que vienen de los abuelos, de que antes pasaba un río por Metepec, por el centro, y se escuchaba que se aparecía la tlanchana, que es una sirena con cola de serpiente. Por eso se me vino mucho a la mente; es parte de la identidad de Metepec y la gente está reaccionando bien, que también es lo importante”, apuntó.
Con más de dos meses y medio de trabajo en su elaboración, la Tlanchana de Bellonset se realizó a base de la técnica tradicional, utilizando únicamente carrizo, hilo, papel maché y engrudo.
La pieza está compuesta por tres partes fundamentales: el cuerpo, una sección de cola y los cascabeles que resuenan como un eco de la leyenda, sostenida con un esqueleto de carrizo.
“Esta es la pieza más alta que he hecho. Como no uso ningún fierro ni bases para sujetarla, podría levantarla hasta 8 metros. Lo que hago es que lleva una base por dentro de puro carrizo; tiene que estar muy reforzada, tiene muchos carrizos cruzados por dentro, que es lo que la sostiene, y también eso hace que no pese. Le pongo protector y barniz para que pueda aguantar las lluvias”, explicó.
Detalles que relacionaran la tradición mexicana
A lo largo de la elaboración, Bellonset buscó la manera de aportar detalles que relacionaran la tradición mexicana y la identidad del Pueblo Mágico, haciendo a la tlanchana en forma de esqueleto e incorporando elementos como una pintura metálica que simula escamas de pescado.
“La hice en esqueleto para que pudiera ser parte de la ofrenda, que represente la muerte, pero con la cola de sirena y serpiente. Los de cultura querían que le pusiera cola de sirena, pero al final le puse también los cascabeles para que hubiera un cambio. También conseguí la pintura metálica y de fondo le metí otros colores para que diera el efecto tornasol, como las escamas de los pescados”, dijo.
Cabe destacar que, para esta ofrenda monumental, Bellonset impartió talleres en siete escuelas locales, donde los niños participaron en la elaboración de lápidas de cartonería, las cuales también forman parte de la ofrenda. Este esfuerzo de colaboración resultó en la producción de 70 lápidas hechas por niños.
La ofrenda monumental permanecerá en las escalinatas hasta el lunes 4 de noviembre.
PAT
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