El equipo femenil de futbol asociación de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), hizo historia al conseguir el subcampeonato en el Campeonato Nacional Universitario de Futbol del Consejo Nacional del Deporte de la Educación (CONDDE), la medalla de plata es el primer metal que consiguen las Potritas.
Para algunas jugadoras equinas fue su debut en un torneo nacional universitario, lo que consideran fue positivo. El pasado sobre ellas no les pesó, e incluso pudieron sorprender a quienes las consideraban el rival más débil.
“La pregunta que nos hacemos, porqué siempre nos subestiman, no sé si es por el pasado del equipo, pero ahora siempre se llevan una gran sorpresa, en 5 o 10 minutos que nos ven jugar tienen que cambiar su planteamieto para sacar el partido contra nosotras”.
Beatriz Sánchez Olvera, medio de contención
El equipo tuvo menos de un mes para entrenar y no pudieron concentarse todas, ya que la mayoría estaba en clases y en exámenes, lo que habla de la potencialidad del equipo, el cual desde el último selectivo disputado a inicios de 2020 terminaron invictas.
“Yo ya anhelaba mucho poder participar en este tipo de torneos, fue una experiencia agradable, porque hubo frustraciones y estrés, pero también muchas alegrías, fue plata pero es una medalla que nos costó mucho sacrificios, esfuerzo y todas le pusimos mucho corazón para conseguirla”.
Karla Carbajal Rodríguez, defensa central
Frida Gómez Muñoz, es una de las jugadoras de mayor experiencia, quien como defensa de las equinas defendió los colores en la Universida Nacional 2018, y ahora tres años después logra la hazaña.
“Por la pandemia hay diferencias, la preparación, en el torneo las medidas sanitarias son diferentes, se siguen nuevos protocolos para seguridad de las jugadoras, del cuerpo técnico, de la sede, yo noté también un cambio de la institución hacia nosotras, el apoyo que se nos dio fue muy grande”.
Las jugadoras coincidieron estar felices y aún estar disfrutando del logro, ya que era una de sus metas, poder lograr una medalla. Ellas saben que sus nombres quedarán grabados en el historial deportivo de la UAEM.
“Para mi representa mucha felicidad, orgullo por representar a esta institución, ahora queda seguir adelnate aquí el tiempo que me queda como universitaria”.
“Me siento muy feliz, yo siempre había soñado con estar aquí, desde pequeña me veía llegar a universidad, jugar un nacional y ganar medalla. De varias compañeras esa era la meta, entonces fue algo muy bonito”, añadió Beatriz.
ASME
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