Vendedores de atole y tamales de la zona terminal denunciaron que han sufrido abuso de autoridad, agresiones y represión.
Señalaron que los inspectores del ayuntamiento de Toluca actúan en colusión con otras organizaciones de comerciantes.
Desde hace tres meses, informaron, los 38 vendedores de tamales que pertenecen a la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata (UPREZ), han sufrido decomisos con lujo de violencia a pesar de que tenían permitido trabajar hasta las 10:00 de la mañana.
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Entre los actos violentos que han denunciado
Silvia Hernández Pérez, integrante de la comisión política de la UPREZ, refirió que uno de los actos violentos ocurrió hace ocho días.
De acuerdo con la comerciante, cuando por lo menos tres personas, entre ellos un menor de edad, fueron golpeados.
Consideró que estos decomisos iniciaron junto con los problemas financieros del ayuntamiento de Toluca y cuando entró en funciones la jefa de inspección de la zona terminal, Karla Hernández Gómez.
“Nos quitan nuestra mercancía y nos entregan (los carritos de tamales) hasta las 3:00 de la tarde. La mercancía se la comen los inspectores, no nos entregan atole, tamales ni pan”.
Reprochó que a ellos, las autoridades municipales les han negado órdenes de pago, mientras a otras organizaciones los inspectores se las entregan, hasta en maletín.
“Nos hemos dado cuenta que están coludidos con las autoridades, ese día les entregaron un maletín con órdenes de pago y el martes ellos exhibieron unas órdenes de pago, despojando a otras organizaciones de sus áreas de trabajo”.
Los vendedores pidieron al presidente municipal, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, frenar este problema, pues con anterioridad lo han solicitado al director General de Gobierno, Mario Montiel Castañeda, y al coordinador de Enlace y Acción Gubernamental, Felipe Naranjo, sin que hasta el momento haya una solución.
NEF
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