Una mesita de trabajo y una hielera son las herramientas que le permiten a la enfermera Susana Martínez Ramírez, atender, sin distinción, a todos sus pacientes de la comunidad.
Niños, madres de familia, adultos mayores y hasta las mascotas de cada familia del poblado de San Lucas Tepango, en Acolman, son su responsabilidad.
Recorre las calles del poblado de San Lucas Tepango, para aplicar vacunas a niños y contra el Covid
Los conoce prácticamente a todos; tiene una agenda en la que lleva la cuenta de todos los pequeños y las vacunas que les ha aplicado o que les hacen falta.
Hace 17 años egresó de la Licenciatura de Enfermería; hizo prácticas en un hospital, pero al hacer su servicio social en un Centro de Salud, definió que era ahí en donde quería desempeñarse. Y lo logró.
“Yo creo que Dios me puso este camino, siempre me gustó ayudar a la gente. El día que llegué a un Centro de Salud dije: De aquí soy”.
La enfermera Susana Martínez expresa que siempre le ha gustado ayudar a la gente
“Me gusta el trato que me da la gente, me gusta tratar muy bien a los pacientes, me gusta recibir muchas bendiciones por parte de mis pacientes, entonces por eso me gustó el trabajo en comunidad”, explicó.
Hace unos meses sufrió de una lesión en la rodilla, pero eso no ha sido impedimento para que, como enfermera del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), recorra las calles en busca de familias que requieren de su auxilio.
“Manejo una agenda en la que voy poniendo cuántos niños tengo, cuántas vacunas hay que programar para esos niños, y que no se les pase… a la gente se le olvida y tengo que andar atrás de ellos”, relató.
Su reciente condición de salud tampoco le ha impedido participar en las jornadas de vacunación contra Covid-19, para inmunizar a los habitantes de esta localidad y prevenir que la pandemia provoque más muertes.
“Estamos en tiempos en los que hay que hacer mucha promoción para que no nos gane esta pandemia; a la mayoría de la gente se le olvida el cubrebocas, que debemos cuidarnos y cuidar a los demás”, agregó.
Esta semana, lleva a cabo la Jornada Nacional de Vacunación Antirrábica Canina y Felina, su labor no cesa
Para esta tarea dividió a la comunidad de unos mil 500 habitantes, en una especie de cuadrantes y convocó a los vecinos para facilitarles que tengan acceso a la inoculación de las mascotas.
De este modo, en menos de dos horas logró vacunar a por lo menos 60 perros y gatos de una cuadra; para los que no acuden a su improvisado módulo, visita a los dueños en sus casas.
Susy, como muchos la llaman de cariño, se apoya de la señora Alejandra, una vecina de la misa comunidad que también reconoce la sensibilidad de la enfermera por estar siempre pendiente de la salud de sus vecinos.
SPM
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