De entre todos los problemas que envuelven al Estado de México hay uno que no es menor, que algunos municipios mexiquenses están prácticamente quebrados.
Según cifras ofrecidas en foros legislativos, provenientes del Órgano Superior de Fiscalización (OSFEM), los municipios alcanzan deudas por 27 mil millones de pesos y de ellos, 20 municipios mexiquenses adeudan 4 mil millones de pesos a proveedores.
En los últimos días hemos leído y escuchado que muchos municipios y hasta entidades gubernamentales pretenden hacer frente a esa crisis vendiendo predios y haciendo caja para pagar incluso sueldos de los funcionarios, sí, no hay dinero ni para los sueldos.
Tal es el caso de Toluca, nada menos que la capital del Estado de México, que para hacer frente a compromisos como el pago de nómina, aguinaldos y a proveedores, el gobierno municipal de Toluca pondrá en venta 10 predios.
De acuerdo con lo aprobado en el Cabildo de Toluca, por la venta se obtendrían unos 400 millones de pesos, lo cual sería insuficiente para la inyección de liquidez que necesita este municipio, de ello dio cuenta el regidor Arturo Chavarría Sánchez, en una entrevista realizada para La Jornada Estado de México.
En una situación similar está Naucalpan, municipio que desincorporará algunos terrenos para venderlos, entre ellos destaca el predio La Victoria, que se ubica en el centro de la cabecera municipal, pero no son los únicos municipios con este tipo de problemas.
En el caso de Toluca, por ejemplo, le asiste la razón al actual Presidente Municipal Juan Rodolfo Sánchez, al subrayar que él recibió el municipio con una deuda muy grande, pero lo cierto es que tampoco ha hecho mucho por sanearla.
Es así que entonces nos encontramos con un problema que pareciera un monstruo de mil cabezas, porque si quisiéramos señalar a un responsable por el actual estado financiero de los municipios, sería imposible.
Y es que nadie debe olvidar que incluso el legislativo se encarga de aprobar las cuentas públicas municipales y perdón, pero yo no observo que desde allí se haga un trabajo de fiscalización efectivo, por el contrario, las cuentas públicas son aprobadas como un mero trámite y dependiendo de la afinidad política que tenga el Alcalde en cuestión en el Congreso.
Hoy los municipios ya están advertidos por prácticamente todos los sectores y parecen ser los “apestados”, pues desde el Gobierno estatal ya se les advirtió que no habrá recursos para salvar a los municipios, el Legislativo también alertó que no se aprobará más deuda para las demarcaciones e incluso hasta los empresarios han dicho que se requieren castigos para los funcionarios que dejen las arcas municipales en ruinas.
Lo cierto es que los municipios no llegaron a esa situación solos, sino con la ayuda o complacencia de esos mismos actores políticos que hoy les dan un portazo en la cara. Es así que lo mejor será encontrar una salida a semejante problema y no dejar que los alcaldes se rasquen con sus propias uñas, pues es un problema que está a punto de explotarle en la cara a la ciudadanía.
Twitter: @campudia
ASME
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