Los artesanos del alfeñique se preparan desde aproximadamente medio año antes para la tradicional Feria del Alfeñique en Toluca, siendo marzo y abril, lo meses en lo que suelen comenzar a preparar el producto que adornan Los Portales de la capital en Octubre.
La señora Rosa María Hernández Venegas, “Rosy”; como le llaman de cariño, forma parte de la cuarta generación de una familia mexiquense que ha llevado, desde los inicios, el dulce tradicional a los puestos que se colocan anualmente en el primer cuadro de la ciudad.
Preparativos para la Feria del Alfeñique 2023
La artesana, señaló que para la edición 2023 de la Feria del Alfeñique, comenzó su producción el último día de abril, lo que puede catalogarse tarde, de acuerdo con su experiencia.
“Se empieza a trabajar por lo regular entre Marzo o Abril para irse con calma. Desafortunadamente yo empecé el 30 de abril, ahí empecé a hacer las primera figuras, y aunque llevo pocas, creo que ya tengo una buena cantidad”, dijo Hernández.
Señaló que dependen mucho de las condiciones del clima para el primer paso de la elaboración, misma que consiste en dejar secar las figuras una vez que se les da forma.
“Se inicia haciendo la masa, que es a base de azúcar glass, se mete en el molde de barro y se deja secar unos 4 días, dependiendo del calor o la humedad porque eso nos perjudica. Si hay humedad o lluvia tarda hasta 12 días, si hay buen son no hay problema, pero si hace calor; como el que acaba de pasar, no te deja trabajar porque las piezas se hacen como cacarizas”, explicó la artesana.
Luego de obtener este resultado, mencionó que comienzan a poner detalles a cada figura, desde las orejas y patas, en caso de los animales; las cuales también se tienen que poner a secar. El decorado se realiza con productos comestibles, pintura y hasta diamantina, pero la base tradicional es el betún
Es necesario impulsar la fuerza de la tradición: Artesana
.
Asimismo detalló que la renovación en sus productos ha sido fundamental para mantenerse en la tradición del dulce, como familia, por más de 100 años, donde han agregado algunas calaveras de juguete dentro de los dulces para los niños y experimentando con diferentes colores y texturas.
Señaló que el interés por parte de la gente existe, que se acerca a realizar preguntas para saber lo que conlleva realizar estos productos, la tradición de la feria crece; sin embargo, menciona que no siempre se le da el valor que merece pues el regateo es constante.
“Yo creo que la gente sí se identifica y lo escucho en comentarios, hasta de mis vecinas, que les da gusto que sigamos dedicándonos a esto, hay otras personas que les sorprende.
La feria creo que sí ha crecido, año con año llega más gente, algunos por tradición y que quieren seguir fomentando en su familia y hay otros que vienen del extranjero y luego luego se nota, porque ellos no te repelan, eso sí es lo malo del mexicano que te pide precios más baratos y eso sí no se vale”, apuntó.
También puedes leer: Premian a siete artesanas mexiquenses en el Concurso Nacional de Textiles y Rebozo 2023
Finalmente apuntó que espera realizar al menos 50 piezas de cada figura que oferta, el año pasado, fueron 300 cajas de dulce las que vendió durante su estancia en la feria, misma que adelantó, este año volverá a ser de más de un mes; según los programas que ya les fueron enviados.
Te puede interesar: Fomentan tradiciones artesanales por el Valle de México
DB