Como parte de los trabajos de colaboración entre el Ayuntamiento de Chimalhuacán y la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, artistas y artesanos de la “Escuela Municipal Taller del Cantero”, difundieron trabajo de Canteros y escultores de la UNAM.
Impartido por estudiantes de la carrera de Diseño Industrial una plática, exhibición y práctica sobre escultura en piedra.
Durante su ponencia el escultor Ángel Octaviano González Buendía destacó la importancia de que se revalore en términos históricos, sociales, culturales y económicos el trabajo de los labradores mexicanos, en general, y de los mexiquenses y chimalhuaquenses, en particular.
Trabajo de Canteros y escultores
Se refirió a la gran aportación histórica de labradores de piedra pertenecientes a diversas culturas prehispánicas –como la olmeca, la teotihuacana, la maya y la mexica, entre otras–, y al enriquecimiento y la aportación que hicieron a los canteros españoles y europeos durante la colonia.
Explicó que los escultores nacionales fueron partícipes destacados del arte novohispano con obras religiosas, de adoctrinamiento, arquitectónicas y utilitarias, y que durante la Post Revolución homenajearon a los partícipes de ésta y otras gestas sociales con grandes obras escultóricas y arquitectónicas y con una clara intención política y educativa.
Y aún el arte contemporáneo, dijo, se caracteriza por sustituir la escultura monumental por el simple chapeo de ornato, hay una mutua aportación entre labradores y demandantes de sus obras y servicios, ya que los nuevos conceptos y diseños sólo se hacen realidad a través de las manos expertas de los canteros.
Escultores de la UNAM
Sin embargo, consideró que debería haber justicia económica para los labradores en este intercambio, pues con frecuencia quienes les encargan alguna obra prediseñada son sólo intermediarios que obtienen muchas más ganancias respecto a lo que les pagan a los canteros a quienes ven como simples maquiladores.
Y aunque escultores como los chimalhuaquenses ya no realizan con la misma frecuencia obras de gran tamaño como el Calendario Azteca, las Cabezas Gigantes Olmecas, los gigantes de Tula, dioses prehispánicos, santos, vírgenes, cruces o héroes independentistas y revolucionarios, y se limitan a obras de menor tamaño, de ornato y de chapeo, opinó que no por ello sus obras dejan de ser de gran valor artesanal o artístico.
Tras su ponencia, los maestros Ángel González y Fernando Arrieta realizaron una práctica con las y los futuros diseñadores industriales, quienes labraron su primera pieza de cantera.
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ASB
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