El Estado de México ha experimentado un notable crecimiento en la agricultura orgánica durante 2024. Esta tendencia se ha visto impulsada por una mayor conciencia sobre los beneficios para la salud y el medio ambiente, así como por el apoyo de políticas gubernamentales que fomentan prácticas agrícolas sostenibles, mismas que han aumentado en un 25%
Según el informe “Desarrollo Agrícola y Sostenibilidad” del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la superficie destinada a cultivos orgánicos en el Estado de México ha aumentado en un 25% en el último año, alcanzando las 15,000 hectáreas.
¿Qué es la agricultura orgánica?
La agricultura orgánica se basa en principios ecológicos que promueven la biodiversidad y la sostenibilidad. Este tipo de agricultura excluye el uso de productos químicos sintéticos, como pesticidas y fertilizantes, y en su lugar utiliza prácticas como la rotación de cultivos, el compostaje y el control biológico de plagas.
Los beneficios de estas prácticas incluyen la mejora de la calidad del suelo, la reducción de la contaminación y la producción de alimentos más saludables, según señaló Rodolfo Hernández, agricultor orgánico de Texcoco.
“Llevamos ya un rato con la agricultura orgánica, desde antes de pandemia. Sí he notado una mejora significativa en la salud de nuestros suelos y cultivos, nuestras tierras están más fértiles y también se reducen costos al dejar de comprar productos químicos, porque son caros”, comentó.
Según el reporte del INEGI, este 2024 se ha registrado un incremento del 30% en la demanda de productos orgánicos en el mercado local, lo que ha permitido a los agricultores obtener mejores precios por sus productos. Este auge ha llevado a más agricultores a considerar la transición hacia prácticas orgánicas. El informe también señala que el 40% de los nuevos agricultores orgánicos han recibido capacitación y apoyo financiero a través de programas estatales y federales.
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Intercambio entre el gremio es una fortaleza
Hernández destacó que ha sido importante el intercambio de conocimiento entre el gremio con la intención de seguir consolidándose en el sector.
“La clave ha sido el apoyo mutuo. Hemos formado una cooperativa donde compartimos experiencias y recursos. Esto nos ha permitido mejorar continuamente nuestras técnicas y enfrentarnos a los desafíos juntos.
Nuestra meta es seguir creciendo y mostrar que es posible producir alimentos de alta calidad sin dañar el medio ambiente. La agricultura orgánica no solo es viable, sino que es el camino hacia un futuro más saludable y sostenible para todos”, concluyó.
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TAR