Sin percatarse que se preparaba para convertirse en la primera mujer en gobernar el municipio donde ha pasado toda su vida, Ivette Topete García fue desde niña una aficionada a la lectura y entregada a los estudios, pues le gusta tener las mejores calificaciones.
Así, logró una Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública, una Maestría en Ciencias de la Administración y un Doctorado en Derecho Parlamentario, que junto con su experiencia docente configuran perfil administrativo y conciliador.
Confiesa que nunca pensó en ser maestra, como la mayoría de sus compañeras de primaria, pero tampoco en dedicarse a la política, quería ser abogada; sin embargo, la vida la encaminó al tema administrativo.
¿Quién es Ivette Topete?
Nacida en abril de 1976, Ivette tuvo una infancia feliz al igual que su hermana menor Suzette; sus padres, Franklin Topete Vargas, originario de Durango y su mamá Luz María García Zamudio, de Sinaloa, las educaron en un ambiente de respeto y responsabilidad compartida.
Luego de casarse, sus papás llegaron a vivir a la comunidad de Delicias, situada en los límites de Amecameca y el municipio de Atlautla, donde Ivette y Suzette vivieron toda su infancia y adolescencia.
“Desde el Jardín de Niños hasta la Universidad estudie en Amecameca, todas estas escuelas están en la cabecera municipal y mi mamá nos llevaba y traía a mi hermana y a mí”, dice.
“Mi papá trabajó muchos años como gerente en una empresa y diario iba hasta Xochimilco, por eso mi mamá nos atendía, tuvimos una infancia plena.
“Los fines de semana mi papá no trabajaba y pasaba tiempo de calidad con nosotras, nos preguntaba sobre la escuela y a veces nos cuestionaba para saber si habíamos aprendido lo que le platicábamos de nuestra semana en el salón de clase.
Ivette Topete convivía poco en la escuela
Ivette Topete convivió poco con sus compañeros de escuela, pues al vivir retirada del centro de Amecameca no tenía la facilidad, como los demás, de salir por las tardes a jugar o platicar, pues su mamá no podía siempre llevarlas y su papá no les permitía salir solas.
Dos veces a la semana, Luz María las llevaba a tomar clases de inglés, danza y música, como actividades extraescolares.
Las pale-locas, los ticos, y los chicles motitas eran sus golosinas favoritas y le hacen recordar que era muy dulcera, aunque “pensar en una paleta payaso o en unas ‘troni rocas’ era un lujo que nos podíamos dar, ahorrando el billete de 5 mil viejos pesos que nos daban para gastar en la escuela”.
“Al salir de la secundaria y entrar a la preparatoria Sor Juana, donde por cierto me encantaba jugar basquetbol, mi papá comenzó a involucrarme en la administración del negocio que para entonces había iniciado con un socio, ya no trabaja para otros, se había vuelto emprendedor”, recuerda.
“Nos enseñó a llevar la contabilidad de su negocio, inventarios y facturas, creo que ahí me nació el gusto por la administración, porque yo quería ser abogada; en ese entonces no había licenciatura en derecho en la Unidad Académica de la UAEM que está en Amecameca”.
Le dan novatada por estudiosa
Siempre fue “matada para los estudios”, en la preparatoria hacían la novatada a los de nuevo ingreso, les rompían cascarones de huevo con harina y confeti .
“A pesar de que me avisaron qué día sería la novatada, no quise faltar a mis clases, pero no me fue tan mal como a los demás, porque le pedí a mi mamá que me esperara en la puerta con el carro para salir corriendo y meterme a la carrera, así que me toco poca harina. Ahora ya no se hace eso afortunadamente”.
Tres años después, cuando termino la preparatoria, pensaba estudiar la licenciatura en Derecho, pero mi papá nos sobreprotegía y no quería que saliéramos a estudiar lejos, entonces me decidí por Ciencias Políticas y Administración Pública.
Poco tiempo después de titularse, Ivette se casó con Juan Manuel, con quien por cierto eran novios desde que ingresó a la Preparatoria y cuatro años después nace su primogénito, a quien registraron como Manuel.
Sin planearlo se volvió maestra
Con su esposo como equipo, ambos comenzaron a trabajar como docentes.
Ella laboraba como maestra de prepa y licenciatura, pero al nacer su hijo dejó de trabajar para dedicarse a cuidarlo. Con la experiencia docente, junto con su hermana y su mamá se animaron a abrir una escuela preescolar y primaria.
Inquieta desde niña, se animó a participar en el concurso de insaculación de consejeros Distritales y logra trabajar en el Instituto Nacional Electoral.
Con la experiencia docente, durante la administración de Eruviel Ávila Villegas, la invitaron a dirigir el Tecnológico de Estudios Superiores del Oriente del Estado de México (TESOEM).
Al terminar su etapa como titular del TESOEM, fue invitada a participar por primera vez como candidata a diputada local y decidió estudiar el Doctorado en Derecho Parlamentario.
De ahí el destino la vuelve a colocar en temas educativos y la nombran Rectora de la Universidad Tecnológica de Nezahualcóyotl.
Afirma que su gran proyecto de vida es su familia y las oportunidades que le ha brindado el gobierno no han sido metas personales, sino como resultado de hacer las cosas de la mejor manera.
Ivette Topete lista para gobernar
Preparada para continuar el emprendimiento educativo, sin planearlo, la llamaron para encabezar un proyecto, desde el PRI, para ser candidata y convertirse en la primera mujer en ser presidenta de Amecameca, a 160 años de su fundación.
El 6 de junio de 2021, la mayoría de los electores que acudieron a las urnas le dieron la confianza para encabezar la administración municipal de su tierra.
Con un profundo amor por su tierra y segura de la experiencia que ha acumulado, Topete se siente positiva de hacer un buen gobierno, quiere devolver a Amecameca lo que a ella le brindó en oportunidades de desarrollo y donde su familia vive a gusto y sin peligros.
Con los pies bien puestos en la tierra, sabe que es difícil, pero espera honrar su palabra y hacer un buen gobierno en Amecameca.
TAR
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