La conmemoración del Día Internacional de la Lengua Materna se realiza cada 21 de febrero, con la intención de preservar y difundir la inmensa cultura de las lenguas originarias, de poblaciones indígenas de cada región en el mundo.
Las lenguas originarias desempeñan un elemento esencial en la vida cotidiana cultural de los países, no sólo como instrumento de comunicación, educación, integración social y desarrollo, sino también como un lugar de identidad, historia cultural, tradición, memoria individual y colectiva.
Está propuesta internacional, busca promover políticas públicas que protejan las expresiones originarias, así como recuperar su importancia dentro de la población, para eliminar discriminación o cualquier tipo de segregación social y económica, herencia de procesos coloniales.
Resaltando que, cuando desaparecen las lenguas maternas desaparece un mundo intelectual.
Te puede interesar: GEM lanza convocatoria al «Concurso de Judas 2024»
Lenguas originarias en el Estado de México
En el estado de México se mantienen vigentes cinco lenguas originarias, mazahua, otomí, nahua, matlatzinca, y tlahuica, además de las lenguas indígenas migrantes, como el mixteco, mazateco, zapoteco, totonaco, y mixe. Según el último registro del INEGI, hay 222 mil 394 hablantes de las cinco principales lenguas oriundas.
El pueblo mazahua es el más numeroso al contar con 116 mil 240 hablantes, lo que representa el 52.27 por ciento. En segundo lugar se encuentra el pueblo otomí que registró 97 mil 820 personas, es decir el 43.20 por ciento.
La población otomí se encuentra asentada mayoritariamente en municipios; como Aculco, Temoaya, Ocoyoacac, Toluca, entre otros.
Mientras que los mazahuas, representan el pueblo indígena originario más numeroso en el Estado de México, asentados en los municipios de: San Felipe del Progreso, Ixtlahuaca y Atlacomulco.
También puedes leer: Circo, un espectáculo itinerante que trasciende generaciones
DB