Un nuevo escándalo rodea al coordinador de Salud del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), Carlos Aranza Donis. Según trascendió en redes sociales, el funcionario mexiquense habría sido uno de los pocos privilegiados que lograron entrar al Súper Bowl celebrado en el Hard Rock Stadium en Miami.
Los organizadores de este evento confirmaron la venta de todas las 14 mil 500 entradas que fueron puestas a la venta al público, dejando otras siete mil 500 al personal sanitario que fue invitado por la NFL para estar en el Raymond James Stadium.
Con número limitado de asientos disponibles para los aficionados, los precios de las entradas se dispararon desde el inicio hasta los 18 mil 450 dólares a partir del viernes por la tarde para observar el partido entre los Jefes de Kansas City y los Bucaneros de Tampa Bay, Florida.
Las entradas el viernes por la tarde llegaban a los 40 mil dólares, pero el domingo antes de iniciar el partido ya se cotizaban en 100 mil dólares.
En pleno semáforo rojo y con los hospitales a tope, el director de Servicios de Salud del gobierno del Estado de México se fue al Super Bowl.
La Secretaría de Salud estatal confirma que a la fecha 88 mil 294 altas sanitarias de mexiquenses que sufrieron Covid-19, 145 mil 132 casos positivos, 167 mil 634 negativos, 25 mil 234 sospechosos, 21 mil 889 fallecimientos, el resguardo domiciliario de 28 mil 573 personas y en hospitalización 3 mil 118 pacientes en nosocomios de la entidad y otros 3 mil 258 en distintas entidades del país.
Vale recordar que el 24 de diciembre pasado este funcionario se vio envuelto en un escándalo porque recibió la vacuna contra el Covid-19, a pesar de que no se encuentra en primera línea de combate a la pandemia.
ASME
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