La Central de Abasto de Toluca vive asediada por el crimen organizado. En los últimos tres meses han sido ejecutados cuatro locatarios a plena luz del día y hasta ayer nadie había sido detenido.
La extorsión es uno de los principales delitos contra los comerciantes, según denunciaron los propios locatarios, que por enésima vez alzan la voz para que intervengan las autoridades.
La administración cuenta con unos 80 elementos de una empresa de seguridad privada, sin embargo, eso no es suficiente para contener a la delincuencia.
“Aquí entra de todo, se confunden entre los clientes (rateros), ya cuando sientes, es porque asaltaron o mataron a otro de nosotros, estamos muy mal y luego con la pandemia nos llueve sobre mojado”.
Comerciante
En la central existen unos dos mil locales e ingresan en promedio 40 mil clientes, tienen cámaras de seguridad, pero de nada sirve.
Ni las últimas muertes de manera violenta, ni el virus alejan a la gente. Dicen que tienen que salir.
“Con el bicho y la muerte rondando hay que salir para comer, no podemos estar encerrados, esta vez que mataron al Jarocho, sí, vimos y todo, pero la vida sigue, ni modo que el gobierno nos mantenga”.
Diablero
El 31 de agosto, Alfredo, un distribuidor de huevo, junto con uno de sus empleados, fueron acribillados en la Nave M.
Luego, el 6 de octubre en la Nave B, Omar, también distribuidor de la Central, fue asesinado y dos de sus trabajadores resultaron heridos.
Apenas el miércoles 9 de diciembre, al Jarocho, que vendía piñas, lo mataron en la Nave G.
En los tres escenarios actuaron hombres armados, quienes se cubrían el rostro y con el cubrebocas, pasaron desaparecidos.
Ante la ola de inseguridad, el Ayuntamiento de Toluca se hizo a un lado de estas muertes. El alcalde Juan Rodolfo Sánchez Gómez afirmó que la seguridad le corresponde a la policía estatal.
“No ha podido quedar bajo la responsabilidad del gobierno municipal porque sigue sin entregarse, por lo tanto, no tenemos la posibilidad de intervenir en la seguridad al interior de la central, que sigue en manos de particulares”.
Juan Rodolfo Sánchez Gómez
Hoy, la Central de Abasto de Toluca no sólo pide la presencia de la policía municipal, exige la intervención de la Guardia Nacional.
ASME
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