Incendios, plagas y tala clandestina arrasan los bosques, son miles de hectáreas las afectadas y específicamente en la región de los Volcanes.
En 2022 se estimó una pérdida de masa forestal de más de tres mil hectáreas -2 mil 500 en incendios y cerca de mil por ataques de plagas-, sin contar el daño ocasionado por la tala ilegal, reveló Rafael Parrilla Arrollo, maestro en ciencias y representante del Ejido Emiliano Zapata del municipio de Amecameca.
Aunque este año se registró uno de los incendios más devastadores en la historia de Amecameca el cual consumió cerca de mil hectáreas, el especialista advirtió que el calentamiento global ha favorecido la incursión de plagas a los bosques altos de los volcanes, pues al eliminarse la barrera de la temperatura se crean condiciones para que otras especies de parásitos asciendan a los bosques de una de las reservas naturales más importantes del centro del país.
Edomex: incendios, plagas y tala clandestina arrasan los bosques
Explicó que en el Parque nacional Izta-popo predomina una especie de coleóptero o escarabajo llamado dendroctonus mexicanus, pero debido al aumento de la temperatura, otra plaga conocida como dendroctonus frotalis, que normalmente vive a mil 700metros de altura sobre el nivel del mar ha ascendido a estos bosques al tener condiciones para su reproducción.
Además de que la sequía vuelve más vulnerables a los árboles pues al presentar cierto nivel de deshidratación se reducen sus mecanismos de defensa ante el ataque de la plaga.
“Esta especie tiene un ciclo de vida más corto, por lo cual se vuelve más agresiva con los árboles. Cuando llega al bosque se apodera de los árboles que tienen un estrés hídrico; primero llega la hembra al árbol, crea un pequeño orificio, ingresa y empieza a construir una galería nupcial entre la resina que el árbol empieza a producir y atraen a los machos, ahí se reproducen y los huevecillos incuban aproximadamente en seis días, y en ese periodo eclosionan y nacen las larvas”.
“Éstas duran entre 46 y 48 días en siete estados, esto significa que la larva va creciendo, se va desarrollando se va movilizando al interior del árbol y entonces va alimentándose del sistema circulatorio del árbol y es cuando nosotros nos empezamos a dar cuenta que el árbol empieza a tener grumos, empieza a supurar resina como si fuera viruela”, explicó.
Pero también precisó que estas plagas, también conocidas como “descortizadores” están asociadas a un hongo que contamina el interior del árbol y es el que verdaderamente mata a las especies forestales, es decir que estos insectos son vectores de una enfermedad.
Dijo que un árbol enfermo o plagado puede infectar, en tan sólo 15 días hasta 25 ó 30 ejemplares a su alrededor con un impacto negativo importante.
TE SUGERIMOS: Huixquilucan: Pobladores se manifiestan, piden pozo para abastecimiento
Ataque de plagas
Añadió que los bosques de la región cuentan con varias especies de árboles, entre las que destacan el pino, cedro y oyamel, de ellos, refirió que el oyamel puede llegar a padecer una triada de insectos al mismo tiempo scolytus que se concentran en las partes altas de las ramas, más abajo phíteoptorus, y en el fuste pseudohylecinus, por lo que es importante prevenir y detectar su presencia.
Para ello, consideró que es fundamental crear alianzas estratégicas con universidades para conocer mejor la problemática y que los ejidatarios reporten cualquier afectación en cuanto detecten la presencia de plaga para que su predio sea intervenido por parte de las autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) o la Protectora de Bosques (Probosque).
También afirmó que es necesario que las autoridades fortalezcan las políticas públicas para preservar los bosques, a fin de concientizar a la población sobre la importancia del medio ambiente, así como para hacer cumplir las normas y las leyes existentes en la materia, además de agilizar los trámites para atender los reportes e iniciar los saneamientos forestales ya que actualmente pueden tardar meses, permitiendo que el problema se agrave.
TAR