Cuando los temas relacionados con el agua se ponen de manifiesto en un país con tantos problemas como los que tiene México, es difícil decidir cuál de ellos debe estar por delante de la bandeja de asuntos a resolver. Por supuesto que la tarea de los que nos ocupamos de los temas de la economía del agua es seguir abonando, pero no nos abstraemos de los demás temas ya que todo guarda relación con todo, vivimos en una sociedad y existen elementos objetivos y subjetivos que nos interrelacionan.
Hablamos en la entrega pasada acerca de la percepción de los servicios que son responsabilidad del gobierno, se evaluaron 20 de ellos, los servicios de agua potable se ubicaron con una satisfacción general nacional de 50.7%, justo en medio de la tabla.
Entre los mejores evaluados están los servicios de transporte por teleférico, cablebús o mexicable, educación pública universitaria, y servicio de energía eléctrica, incluso la recolección de basura está por encima, con el 72.6% de mexicanos que señalan estar satisfechos.
Por debajo de los servicios de agua, se encuentran los servicios de salud (tanto del IMSS como del ISSSTE), el drenaje y alcantarillado con 45.4%, alumbrado público, transporte público y en el fondo policía y calles y avenidas con 29.7 y 27.2%, respectivamente.
Por supuesto que llama la atención la diferencia entre la aceptación de dos servicios públicos muy relacionados, la energía eléctrica y los de agua potable, drenaje y alcantarillado, el primero está a cargo del gobierno federal y el segundo a cargo de los municipios, diferencia que ya hemos comentado en otras ocasiones y debe ser digno de un debate abierto, serio y objetivo en México.
Los otros servicios que están por debajo son preocupaciones, por supuesto válidas y que deben ser atendidas de forma prioritaria si están identificados como principal fuente de preocupación de los mexicanos, hay que aclarar que la encuesta del INEGI (ENCIG 2023), no pregunta qué problema hay que arreglar primero y cuáles después, es solo la percepción de los servicios de recibe, pero un dato que vale la pena resaltar es la corrupción por el pago o solicitud de los servicios públicos, en este rubro apenas el 0.9% de los mexicanos identifican corrupción en él, incluso bajó 0.2% respecto al 2021.
Otro dato que sobresale es el de la confianza en instituciones o actores de la sociedad, siendo los Organismos Públicos Descentralizados de los que mayor confianza inspiran, se encuentran en el lugar ocho de 25, y que es justamente la figura administrativa que hemos recomendado para los prestadores de servicios públicos, separándose de los gobiernos municipales, que se encuentran en el lugar 17.
Un dato adicional que llama la atención, es el medio de pago, de 2021 a 2023 creció en 6.7% el pago en instalaciones de gobierno, mientras que el pago por internet apenas lo hizo en 1.8%, demasiado bajo dada la tendencia del uso de apps, sin duda en algún momento se revertirá esta situación, pero nos puede estar mandando una señal también, de la falta de confianza de nuestras instituciones en estos tipos de trámites, que hay que decir que dejan mucho que desear en la mayoría de las ocasiones, portales no amigables, complicaciones de pago y pagos no reconocidos. Hay que trabajar más en ello.
Sin duda, México tiene muchos problemas que resolver, hagamos de los servicios de agua potable, drenaje y saneamiento un parteaguas de cómo sí se pueden resolver, donde la agenda pública de algo tan elemental para la vida sea un punto de encuentro y acuerdos.