Al noroeste de la entidad mexiquense se ubica El Oro, considerado una de las antiguas glorias mineras del país, que destaca por ser un Pueblo Mágico.
Mismo que busca difundir su riqueza natural, cultural, histórica, gastronómica y artesanal.
Este municipio forma parte de los 10 que cuentan con la denominación, junto con Aculco, Ixtapan de la Sal, Malinalco, Metepec, Teotihuacán.
También San Martín de la Pirámides, Tepotzotlán, Tonatico, Valle de Bravo y Villa del Carbón.
Conoce El Oro en el Edomex
El Oro se ubica a 96 kilómetros de Toluca, la capital mexiquense, y colinda con Temascalcingo, Atlacomulco, Jocotitlán, San Felipe del Progreso y Villa Victoria, así como Tlalpujahua, en el estado de Michoacán.
Es considerado un destino con grandes joyas arquitectónicas entre las que destaca el Teatro Juárez, construido en la época porfiriana e inaugurado el 5 de febrero de 1907.
Además, es uno de los 14 teatros centenarios y su escenario ha sido testigo de la presentación de artistas como Enrico Carusso, La Tetrazini, María Conesa, Esperanza Iris y Virginia Fábregas, entre otros.
Su arquitectura conjuga elementos del neoclásico y del art nouveau
El Palacio Municipal es un edificio de inicios del Siglo XX. La fachada del recinto tiene un estilo ecléctico mientras que el decorado interior es de estilo art nouveau.
En la entrada, los visitantes encontrarán el Mural “Génesis Minero”, que retrata la vida de los habitantes en esos años, creado por el pintor Manuel D’Rugama.
Por su historia y arquitectura ha sido declarado monumento histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
El Tiro Norte es un sitio que debe ser visitado
Consiste en una estructura de madera que ayudaba a los trabajadores a extraer del interior de la mina la piedra que contenía el mineral.
Única estructura de madera en el país que aún se conserva en pie.
Además, cuenta con un teatro al aire libre, un espacio de descanso.
Otro atractivo es la Presa Brockman, es que se puede disfrutar de una experiencia de contacto con la naturaleza, senderos apacibles, vida silvestre y panoramas para tomar fotografías.
Como parte del turismo religioso se puede admirar la Parroquia de Santa María de Guadalupe, de estilo neoclásico. Su construcción comenzó en 1783, con muros de adobe y techos de teja española y tejamanil.
Originalmente fue diseñada con una sola torre y fue hasta mediados del siglo XX que se construyó la segunda.
En cuanto a la gastronomía destaca La Chiva, un licor tradicional elaborado con 21 hierbas amargas y dulces.
Entre las que están la hierbabuena, manzanilla, menta, toronjil, peshtó, maro, cuasia, prodigiosa y demás.
Mismas que se deben poner a secar al sol sobre petates para que conserven sus propiedades.
SPM
Deja una respuesta