Los 50 ejemplares que habitan en el santuario “Burrolandia”, ubicado en el municipio de Otumba, se encuentran en riesgo de morir ante la ausencia de visitantes y de recursos económicos para seguir alimentándolos.
Los administradores del parque temático, único en su tipo en América Latina dedicado a preservar esta especie en peligro de extinción, hicieron un llamado a la población para la donación de algunos alimentos pues advirtieron que, ante la emergencia sanitaria, se han visto considerablemente afectados.
Ana Alfaro, guía del sitio, explicó que la asociación civil no recibe ingresos de ninguna institución gubernamental o apoyos de empresas y que sobrevive de las aportaciones de los visitantes, principalmente.
Por ello han recurrido a las redes sociales para pedir la donación de alfalfa, cebada, maíz quebrado o minerales, pues carecen de dinero para mantener a los animalitos que consumen en promedio 10 pacas de alimento al día.
“Lo que teníamos para poder alimentar a los burros se está acabando, ahora hemos ido haciendo más pequeñas las raciones, ya que se pretende no dejar de alimentarlos; es poco lo que se les da y no es suficiente”, explicó la joven.
Incluso, detalló, que por el momento suspendieron el programa de rescate pese a que han tenido solicitudes de Sonora y Guerrero para el traslado de algunos asnos, pues sin recursos económicos se ven imposibilitados de poder atenderlos.
El santuario, único en su tipo en América Latina dedicado al rescate y protección del burro mexicano, fue instalado en el año 2006 en un predio a un costado de la estación del ferrocarril, solo con dos ejemplares y actualmente ya cuenta con 50 animalitos.
Se estima que del año 1991 a la fecha el número de burros en México se redujo de 1.5 millones a poco más de 300 mil ejemplares, lo cual coloca a la especie en peligro de extinción.
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