El escritor Enrique Serna aseguró que el cuento es un género que en la actualidad se ha visto severamente mermado, pero que sigue alimentando a otros como la industria cinematográfica. Como ejemplos puso a las películas “Aladdín”, de Disney, basada en los cuentos “Las mil y una noches”; o “La Cenicienta”, “Hanzel y Gretel” y “Rapunzel”, que son cuentos de los Hermanos Grimm.
En la conferencia Magistral “Los retos del cuento en el siglo XXI “, presentada en la Feria Internacional del Libro del Estado de México, “FILEM 2020”, aseguró que lo grave no es que la mayoría de la gente no sepa quiénes son los autores originales de esas historias, ya que el mejor homenaje que se le puede rendir a un autor es que su nombre se olvide porque la obra se volvió muy popular y ya nadie se acuerda quién la escribió.
“Lo lamentable es que la gente sólo conozca las historias por las versiones cinematográficas; al limitarnos estamos privando, en este caso a los niños, del trabajo imaginativo que los llevaría a pensar cómo son esos escenarios, cómo son los palacios de los cuentos de hadas, las princesas, los caballos y todo eso que es un privilegio de cualquier lector”.
Y añadió: “al ejercer la creatividad para complementar el significado de un texto, los niños tienen una enorme facilidad para hacerlo, pero al darle todo digerido y “empaquetado”, la imaginación ya no se esfuerza por crear los mundos, eso es empobrecedor y es una desgracia que deberíamos lamentar”.
Para el escritor, los principales enemigos del cuento en la actualidad son la mercadotecnia del espectáculo y la mercadotecnia editorial, las cuales buscan predecir con la mayor exactitud los gustos del público para ofrecer lo mismo una y otra vez; ante ello, el público elige algo porque eso se les enseñó.
“El cuento es el género que ya muchas editoriales no quieren publicar; aunque hay cuentistas jóvenes, les resulta difícil encontrar editores porque las editoriales dicen que no se vende, basados en los reportes de venta anuales”, expuso.
Agregó que hoy en día se lee menos cuentos que novela y esto lo amerita a la complejidad del primero de ellos; “el cuento es el género más difícil de la narrativa, porque el reto de contar una historia con el mínimo de palabras es siempre un desafío importante para cualquiera”.
El también novelistas y ensayista recordó que en la actualidad hay cuentistas con gran cantidad de lectores como Alice Munro, el brasileño Rubén Fonseca o Hakuri Murakami, quienes por sus cualidades permiten mantener contacto con el lector común y que es una tarea cultural de primer orden.
“Podemos revertir los efectos mediante la publicación de cuentos en las revistas de todo el mundo, incluso en revistas no literarias; hay que librar una batalla en la escuela, una batalla que forma parte de cómo despertar el gusto en la lectura y los adolescentes; por desgracia los niños cuyos padres no leen se encuentran en una grave desventaja en comparación a los que leen”, finalizó.
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