El Fondo Monetario Internacional (FMI) mejoró la perspectiva de crecimiento para México en este año, pero redujo la de 2024.
Esto debido a “la inesperada resiliencia de la demanda interna y a un crecimiento mayor de lo previsto en las economías de sus principales socios comerciales”.
El organismo aumentó de 1.2 a 1.7 por ciento el estimado de crecimiento para 2023, al tiempo que pasó de 1.8 a 1.6 por ciento el del próximo año, en línea con una desaceleración de la economía global que ya se advertía desde su último informe en octubre “Perspectivas de la Economía Mundial”.
Fondo Monetario Internacional reporta crecimiento
Para 2022, el FMI reporta un crecimiento de 3.1 por ciento en la economía mexicana, cercano al 3 por ciento previsto por el sector privado y también a los estimados que difundió Rogelio Ramírez de la O, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a mediados de enero.
Así mismo, la institución proyectó que el crecimiento mundial será de 2.9 por ciento en 2023, por encima de la previsión de 2.7 por ciento que publicó en octubre. Sin embargo, la cifra marca un menor ritmo de la economía global que el año pasado, debido a los efectos de la guerra entre Ucrania y Rusia, así como al incremento de tasas de interés
“La subida de las tasas de interés de los bancos centrales para combatir la inflación y la guerra de Rusia en Ucrania continúan lastrando la actividad económica.La rápida propagación de la covid-19 en China frenó el crecimiento en 2022, pero la reciente reapertura ha desbrozado el camino para una recuperación más veloz de lo anticipado”, detalló el organismo.
Para 2024, prevé que la economía global avance 3.1 por ciento.
TE SUGERIMOS: Incremento en impuestos pega a mexiquenses
Caso Estados Unidos
En el caso de Estados Unidos, principal socio comercial de México, el FMI pasó su estimado de crecimiento para este año de 1 a 1.4 por ciento, debido a los efectos de “arrastre” que ha tenido la demanda interna en el resto de la economía;
Mientras que para 2024 redujo de 1.2 a 1 su previsión, “debido a la trayectoria más empinada de las subidas de las tasas de la Reserva Federal, que alcanzarán un máximo de aproximadamente 5.1 por ciento en 2023”.
Desinflación tomará tiempo
“Hay indicios de que el endurecimiento de la política monetaria está empezando a enfriar la demanda y la inflación, pero la totalidad del impacto probablemente no se materializará antes de 2024 (…) el proceso de desinflación tomará tiempo”, advirtió el Fondo Monetario Internacional.
Así mismo, se espera que a mediados del próximo año los precios generales y su componente subyacente seguirán por encima de los niveles previos a la pandemia en más de 80 por ciento de los países.
El FMI estima que la inflación mundial disminuya de 8.8 por ciento en 2022 a 6.6 por ciento en 2023 y a 4.3 por ciento en 2024, niveles aún superiores a los observados entre 2017 y 2019, cuando reportaron un promedio de 3.5 por ciento.
“Ante la crisis del costo de vida, la prioridad sigue siendo lograr una desinflación sostenida. Con condiciones monetarias más restrictivas y un menor ritmo de crecimiento que podrían incidir en la estabilidad financiera y de la deuda, resulta necesario recurrir a herramientas macroprudenciales y afianzar los marcos para la reestructuración de la deuda”, recomiendan.
Con información de La Jornada
CONTINÚA LEYENDO: AIFA una alternativa para las empresas nacionales e internacionales
DMM