Voluntarios de diferentes comunidades parroquiales, jóvenes y autoridades locales armaron brigadas para retirar los escombros que quedaron de la iglesia consumida por un incendio en Ecatepec la noche del pasado 1 y 2 de noviembre en la colonia Ampliación Tulpetlac.
En el templo de San José esposo de la Virgen María se observa a trabajadores organizándose para sacar los desechos y a mujeres preparando alimentos para quienes participan en esta labor.
La calle Chiapas, donde se encuentra el inmueble, permanece cerrada para facilitar la movilidad de la maquinaria pesada que estará en el sitio hasta que el terreno quede totalmente limpio.
Iglesia consumida por incendio en Ecatepec es reconstruida
El párroco Rogelio Romero Alcántara explicó que continúan en la etapa de retirar toda estructura colapsada y al mismo tiempo reconoció la suma de esfuerzos de diferentes sectores que han arribado en su auxilio.
“En esta primera fase los trabajos consisten en quitar todo el escombro y toda la parte colapsada ahí con la ayuda de todos, por parte de las autoridades, de la ciudadanía, de los fieles, poco a poco vamos apoyando”, indicó.
Recordó que la parroquia de esta colonia ubicada en las faldas de la Sierra de Guadalupe comenzó a edificarse el 2 de abril del año 1982.
“Desgraciadamente es una pérdida tan terrible que nos lastima en los sentimientos, pero Dios nos dará la fortaleza para reconstruir esta iglesia”, confió.
Las misas se realizan en la vía pública
Precisó que las misas diarias y dominicales continúan celebrándose, aunque debajo de una lona y en la vía pública.
“Las actividades siguen, las celebraciones, aunque nos estamos ajustando en los espacios para poder hacerlo”, agregó.
La noche y madrugada del 1 y 2 de Noviembre, durante las festividades del Día de Muertos, un voraz incendio envolvió la iglesia ubicada en las inmediaciones de la autopista México-Pachuca.
Aparentemente la llama de una veladora de la ofrenda habría provocado el siniestro que consumió por completo el templo que acaba de cumplir cuatro décadas de su fundación.
Esa noche, los colonos nada pudieron hacer para rescatar muebles o imágenes religiosas; el párroco y otras dos personas que viven ahí salieron ilesos.
TAR