Existen múltiples razones para desear que sean muchas y cada vez más las mujeres que se presenten como candidatas a cargos de elección popular, otra cantidad de razones igual o mayor para conminar al electorado a que sean muchas y cada vez más las mujeres electas y sobre todo muchas y cada vez más las mujeres que se atrevan a gobernar a favor de la búsqueda de la tan mencionada Igualdad Sustantiva, ese unicornio por el que ahora muchas de las políticas públicas suspiran.
Cuando menciono Igualdad Sustantiva, me resulta imposible dejar de escuchar a manera de bandita sonora la hermosa voz de Mercedes Sosa y su plegaria:
“¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón…” Casi de manera inmediata pienso en “Tanta sangre que se llevó el río” y las 947 mujeres víctimas de feminicidio del 2022.
Y es que pareciera que nada resulta suficiente para comprender que nuestro lugar en el mundo, – el lugar de las mujeres – no puede seguir supeditado al entramado de la violencia generada y en muchas ocasiones legitimada por el machismo patriarcal. Entonces creo en la posibilidad de hacer cambios, de crear nuevos ecosistemas donde las mujeres – población mayoritaria, con un 52% de los residentes en este país – seguimos siendo tratadas como minoría en muchos casos y como ciudadanas de segunda.
La cuasi nula respuesta y resolución de los casos de feminicidio laceran la credibilidad de algunas instituciones, la mínima cantidad presupuestal puesta al servicio de la justicia que no permite acciones que den certeza del interés en que las mujeres vivamos en una sociedad libre de violencia.
La esperanza renace cuando acciones afirmativas – como las impulsadas desde el Instituto Nacional Electoral – posibilitará que: de las nueve gubernaturas que será elegidas durante 2024 – en Chiapas, Guanajuato, Morelos, Puebla, Tabasco,
Veracruz, Jalisco, Yucatán y CDMX, los partidos políticos deban al menos postular a cinco mujeres, garantizando de este modo la paridad al menos en el nombramiento de candidaturas.
Otro cantar era la cantidad de financiamiento para campañas que desde ahora será elevado de un 40 a un 50 %, y en los tiempos de radio y TV destinados a las candidaturas de nuestras congéneres en periodos electorales.
Toca ahora trabajar en las plataformas de campaña, para evitar que se conviertan en malos remedos de lo que se realiza de manera cotidiana. Plataformas que realmente tomen en cuenta a ese sector de la población precarizado, infravalorado y además vulnerado en el cotidiano.
Estaremos pendientes desde aquí para que la simulación no sea el pan nuestro y que realmente valga la pena el que se invierta en la posibilidad de ser quienes tomemos las decisiones del acontecer de nuestra nación…
Mientras tanto, es cuanto.
Paloma Cuevas R.
Embajadora de Cultura WEDO Estado de México. Ex Secretaria Nacional de Cultura para México, por RIMLA Internacional. Reconocimiento por Trayectoria como Columnista por la LXV Legislatura y Comunicadores por la Unidad 2021 y 2022. Presea y Pergamino Leona Vicario 2020.
Escritora/ Columnista / Traductora
Activista a favor de los Derechos Humanos. Comunicación y Relaciones Públicas.
Temas de investigación: Cultura, Política, Derechos Humanos, Feminismos y Erotismo
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