El litio, del que tanto se ha hablado en los últimos días y sobre todo tras el rechazo en la Cámara de Diputados a la reforma eléctrica que impulsaba el Presidente Andrés Manuel López Obrador, es ciertamente un metal que cobra mucha importancia a nivel mundial debido a su capacidad para la creación de baterías de iones lo que lo convierte en una de las principales alternativas para dejar atrás los combustibles fósiles, de allí que no sólo México, sino muchos países en el mundo vuelvan la mirada hacia este material. 

El litio ha cobrado gran relevancia mundial

Y es que la transición de autos de combustión a eléctricos es, probablemente, la mayor transformación en la industria automotriz del siglo XXI y es aquí donde cobran relevancia la creación y desarrollo de baterías de iones de litio, ¿se imagina usted de cuántos miles de millones de pesos de derrama económica estaríamos hablando? 

Mientras más se desarrollan las tecnologías, encontramos más y mejores formas de almacenar la energía, por lo que cada vez es menos necesario mantener un combustible quemándose “eternamente” para generarla, sin duda un gran paso en esta transición. 

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Laptops, relojes, celulares, bicicletas y hasta en medicinas también se utiliza este metal ligero, por ello no parece fortuito que el Gobierno federal, a través de la Ley Minera, se proponga “recuperar el control” de la explotación del litio y las enormes ganancias potenciales que podría generar. 

Como ya hemos mencionado, la utilización del litio vendrá en medida en que pueda utilizarse de mejor manera para almacenar la energía ya generada, pues esa es su mayor virtud y para que eso suceda aún falta desarrollo tecnológico y algunos estudios en materia, en tanto, la 4T ha anunciado la defensa del material a través de modificaciones legales, ¿sin embargo, son estas necesarias?   

Veamos, actualmente el artículo 27 constitucional dice a la letra: 

“La propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional, corresponde originariamente a la Nación, la cual ha tenido y tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo la propiedad privada”. 

Es por ello que los materiales que se encuentran en el subsuelo de la nación también tiene el Estado la rectoría, por lo que una empresa minera sólo puede operar en caso de recibir una concesión.

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Si el Gobierno federal decide simplemente no otorgar concesiones para la extracción del litio a privados, no se hace necesaria ninguna otra modificación legal para ello. 

¿Puede el Gobierno federal modificar la Ley Minera?

Sin embargo, el Gobierno federal para modificar la Ley Minera no necesita las dos terceras partes de la Cámara de Diputados -como sí las necesitaba para hacer modificaciones constitucionales con la reforma eléctrica-, por lo que la aprobación de la Ley Minera supondrá ese triunfo que le quitó el fin de semana la Oposición luego de una maratónica sesión de más de 11 horas en la Cámara baja.   

Además, las modificaciones legales a la Ley Minera no significan que más adelante o en otras administraciones no se busque realizar cambios en la misma, tal y como sucedió con la reforma eléctrica de 2013, que se buscó modificar el domingo. 

Cabe resaltar que esta columna se escribe sin saber aún si la Ley Minera -enviada el mismo domingo al Congreso- será aprobada, pero al necesitar los legisladores de Morena la mayoría simple, es muy probable que las modificaciones sean aprobadas.

En fin, ya se verán los beneficios, en caso de que los haya… 

Twitter: @campudia    


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