Lo que nos dicen las encuestas del INEGI respecto a los servicios de agua: ENCIG

El INEGI realiza diversas encuestas que tienen que ver con la prestación de los servicios de agua y saneamiento en México (SAPyS), tenemos por supuesto el Censo General de Población y Vivienda que se realiza cada diez años y que nos ofrece información de los servicios en las viviendas de México, entre otros datos, los Censos Económicos, realizados cada cinco años nos dan cuenta de las unidades económicas que reciben los servicios, personal ocupado en las empresas que ofrecen algún producto o servicio relacionado con el agua, tenemos también las que nos referiremos en el presente artículo: Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG), Encuesta Nacional de Calidad Regulatoria e Impacto Gubernamental en Empresas (ENCRIGE), Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) y la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE).

En ésta ocasión nos referiremos al servicio de agua de la ENCIG 2021, y dejaremos para la siguiente semana el drenaje y alcantarillado, esta encuesta tiene que ver con la experiencia y percepción de la población con trámites gubernamentales con los SAPyS, ésta nos indica que de la población de áreas urbanas con servicio, 51.3 millones lo obtienen de una red pública, de ellos el 60.8% consideran que cumple con las características de pureza y claridad, pero sólo 15.5% confía que es potable, el 35.9% perciben que no existe desperdicio por fugas, y el 57.7% refieren que el suministro es constante.

Lo que destaca de esta encuesta es que el ciudadano es capaz de percibir que es diferente la pureza y claridad de la potabilidad, lo que nos respondería el porqué la población de nuestro país no confía en tomar el agua directamente de la llave, interesante que perciban un gran porcentaje de fugas en la red, que contrastándola con el 50% de las pérdidas por fugas que se reconocen como cifra nacional, habría que explicarnos el por qué la diferencia en casi 14 puntos porcentuales, y finalmente el suministro constante sólo lo reconoce el 57.7% que está muy cercano al porcentaje nacional.

Como siempre las diferencias geográficas en el país son contrastantes, las Entidades del Sureste de la República, junto con Michoacán, Estado de México, Puebla y Quintana Roo son las que presentan un porcentaje menor de acceso al servicio de la red pública (menos de 87.4%), el suministro constante es muy similar pero se agrega Zacatecas y San Luis Potosí, a los que se encuentran entre el 14.1 y 46.1%, el Estado de México reporta una continuidad del 46.2%.

La potabilidad, que es la característica deseable en una adecuada prestación del servicio, suma más Estados que perciben que su agua no es potable, de todo el sur del país, a excepción de Yucatán, Jalisco y Nayarit en el occidente, y prácticamente todos los Estados del Golfo de México, están por debajo del 16.3% de percepción, hecho que contrasta con el tópico de pureza y claridad, donde sólo Guerrero, Oaxaca, y Tabasco se encuentran por debajo del 40.9%. Lo que refuerza el tema que la población si es capaz de distinguir los temas mencionados, o que no confían que a pesar de reconocer al agua como pura y clara, sea apta para el consumo humano.

Finalmente, sólo tres Entidades de la República se encuentran por encima de la percepción que no hay desperdicio por fugas, por encima del 47.8% sólo encuentran Chihuahua, Nuevo León y Guanajuato, interesante también la razón de ésta situación, cabe señalar que al ser encuesta y no censo, se toma una muestra representativa con confiabilidad estadística, mientras que en los censos, es una muestra que tiende al 100%.

DB