Los museos son espacios capaces de adaptarse en situaciones complicadas y superar las adversidades que se presentan en la vida y en la actualidad de la vida social; son resilentes, aseveró Jonatan Chávez Sánchez, Coordinador de Voluntariado y Servicios al Público del Antiguo Colegio de San Ildefonso, en un conservatorio virtual organizado por el programa Cultura y Deporte en un Click 3.0.
Dijo que los recorridos virtuales de los museos tanto de la entidad mexiquense como de otros estados y del mundo, han sido la manera en la que se ha buscado enriquecer la cultura de la población, pero con la firme convicción de que se mantengan en casa.
Pero no ha sido un transitar sencillo, expresó Chávez Sánchez, ya que se han superado muchos desafíos y con gran entusiasmo se han propuesto estrategias que permitan la sostenibilidad de los espacios; además, no se trata sólo de que se mantengan los museos sino promover la resiliencia comunitaria y una recuperación efectiva de la sociedad.
“Adaptarse a la nueva situación de trabajo y generar contenidos referentes al Museo fue complicado en un inicio, ya que nunca imaginamos vivir una situación como esta y mucho menos estar preparados para afrontarla”, agregó Jonatan, durante la charla en la cual estuvo acompañado de Lola Villegas, Enlace de Vinculación Institucional del Centro Cultural Mexiquense Bicentenario.
En el caso particular del Colegio de San Idelfonso, expuso que antes de que se iniciara la pandemia, el Internet y las redes sociales se usaban sólo para hacer promoción a su ubicación, horarios y algún acervo con el que contaba.
Después se creó una plataforma virtual, “San Ildefonso en Casa”, en donde se ofrece una nueva forma de apreciar la majestuosidad e importancia del recinto. Se puede recorren pasillos, patios y salones, los visitantes al sitio digital conocen a detalle, algunos de los murales más representativos de este emblemático espacio.
Pero también comentó que con esta virtualidad se llegan a perder detalles, y fascinarse con la belleza que se puede tener frente a nuestros ojos, dada la naturaleza de lo que significa un video, su velocidad.
“Es tan vertiginoso, llega una imagen, y otra, y otra foto; llega un momento en que hay una sobresaturación por un lado y al mismo tiempo pierdes detalle en observar; esta situación en que nos encontramos nos da una posibilidad de revisar y repasar sobre tus propios pasos”, explicó.
Para finalizar, mencionó que “lo virtual es un gran reto ya que llevar la información al público es una gran responsabilidad”; sin embargo, sirve de aliciente y distractor.
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