El caso de Lulú es uno más de los horrores que viven las niñas y mujeres en el Estado de México.
Lulú era una pequeña niña de tan sólo 13 años de edad que fue asesinada en el municipio de Zumpango tras casi una semana de haber desaparecido.
Como suele suceder, en estos casos, la falta de atención a las denuncias de los familiares de la niña parece haber incidido directamente en el crimen, pues la mamá de la menor buscó levantar una denuncia el mismo día de la desaparición de la pequeña Lourdes (30 de enero), en el fraccionamiento Paseos de San Juan, sin embargo, las autoridades fueron omisas y se negaron a abrir la carpeta de investigación.
Cinco días después, el 3 de febrero, la madre pudo levantar la denuncia para que comenzaran las investigaciones, lo cual se antoja demasiado tarde y aún con esfuerzos de activistas, vecinos y familiares, la niña no fue hallada sino hasta casi una semana después.
El cadáver presentaba huellas de violencia física y agresión sexual, según fuentes policiales.
Lulú desapareció en Zumpango, un municipio donde los habitantes padecen por el incremento en doce diferentes tipos de delito, principalmente robos a casa habitación y homicidios dolosos, cuya tasa por cada 100 mil habitantes, es la más alta en el Estado de México, de acuerdo con un estudio del Laboratorio de Seguridad Ciudadana (LSC).
El análisis hecho a partir de las carpetas de Investigación registradas por el Secretariado Nacional de Seguridad Pública en el primer semestre del 2021 arroja que de los 16 tipos de delitos de alto impacto que analiza el LSC, Zumpango está en el top ten de once de ellos.
Es claro que Zumpango es un foco rojo y el caso de Lulú viene a exponer de nuevo a la luz pública lo vulnerable que está la población, pero sobre todo el grito de justicia, ahora por Lulú, pero también por todas las demás niñas y mujeres asesinadas en la entidad.
Ahora el nombre de Lulú se une al de Angélica, Adeline, Fátima, Valeria, Yessica, Camila, Wendy y una larga lista que se convierten en una voz de lucha de una sociedad harta de exigir justicia y ver pocos resultados.
Hoy fue Lulú y en Zumpango, pero ¿cuántas más?
Twitter: @campudia
Deja una respuesta