En la actualidad, hablar de una coordinación entre representantes de diferentes partidos políticos es casi una utopía, máxime si se habla de una interrelación entre diferentes poderes.
Sin embargo, también hay que destacar que cuando se tiene clara responsabilidad de lo que significa ser representante popular, se buscan alternativas para llevar diversos beneficios a la ciudadanía; ejemplo de ello, es lo que la diputada local por Toluca, Mónica Álvarez Nemer, ha materializado a través del etiquetado histórico de 80 millones de pesos para pavimentación de vialidades en zonas industriales, refrendando su compromiso con todas las organizaciones empresariales, industriales y de servicios.
A todos esos sectores, la legisladora ha logrado reunir en torno a esta iniciativa, sin perder de vista que esto derivará en el mantenimiento de las vías de comunicación y en la generación de nuevos empleos, no sólo para las y los Toluqueños, sino para las y los mexiquenses en general.
Esta gestión, que sin duda alguna es un parteaguas en el municipio, permite visualizar como un pilar fundamental la asignación de recursos dentro de los futuros presupuestos anuales, para el desarrollo económico y la mejora urbano, en apoyo de aquellas empresas que han contribuido al progreso del Estado de México.
Con estas acciones de vinculación interinstitucional se demuestra cómo una eficiente representación popular, a través de la gestión y el correcto ejercicio de sus funciones, puede alcanzar una sinergia que, más allá de temas de partidos políticos, arrojen resultados palpables con alcances históricos, en beneficio de la sociedad.
A simple vista se destaca la madurez política de la legisladora local Mónica Álvarez Nemer para tender puentes de comunicación con aquellos que, en algún momento dijeron NO, por el simple hecho de no compartir la misma ideología política.