Habitantes del fraccionamiento La Cúspide, en Lomas Verdes, Naucalpan, se sienten “rehenes en sus propias casas”, pues padecen de lo que llaman el cobro excesivo de cuotas extraordinarias de hasta 20 mil pesos por parte de la administración, además de multar y privar de servicios a los condóminos.
Destacaron que ya interpusieron demandas civiles en contra de quienes se dedican a sacarles dinero y a sancionarlos cuando no cumplen sus exigencias.
Los inconformes solicitaron a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que a la brevedad intervengan y pongan orden en el edificio ubicado en calle Praderas San Mateo, número 41 en Lomas Verdes.
Naucalpan: Se quejan de altas cuotas en fraccionamiento La Cúspide
Los condóminos María Cecilia Cruz, Manuel Maza, Verónica Rodríguez, Elvia Rebollar, Carlos Mejía y Humberto Romero exigen que se apliquen auditorías a los integrantes de la administración, bajo el supuesto que cometen abusos en contra de los vecinos, que podrían estar tipificados como fraudes.
María Cecilia Cruz denunció que ya son muchos años que esas personas están causando problemas, pero no se les ha podido quitar, ya que constantemente a través de engaños, presiones y mentiras se han apropiado del fraccionamiento, porque ahora ellos son los que deciden lo que se hace y lo que no se hace.
“Nos pidieron una cuota extraordinaria de más de 20 mil pesos a cada departamento, adicional a los 2 mil 300 pesos que se pagan cada mes, que incluye la vigilancia, la jardinería y el sueldo de los supuestos administradores, con el argumento de que se utilizarían esos recursos para pintar el edificio”, indicó.
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Les cortaron el gas y pusieron una cadena
Sin embargo, para realizar esa obra se hicieron cotizaciones y al final quedó como presupuesto oficial el que ellos hicieron, pese a que se realizó una junta “en la que nunca nos mostraron documentos de lo cotizado, además, de que falsificaron una minuta, diciendo que así se había votado, lo que es falso, tan es así que 16 condóminos no estuvimos de acuerdo y ahora nos amenazan de que si no pagamos, van a vender nuestros departamentos para cobrarse lo que les debemos”, explicó la afectada.
Dijo que estos se atrevieron a cortarles el gas y pusieron una cadena para impedirles contar con ese servicio, poniendo en peligro a las familias que habitan en los 48 departamentos del edificio, porque en caso de una emergencia, sismo o fuga de gas, no se podrán quitar esas cadenas.
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TAR