Orquesta Filarmónica Mexiquense integra pieza con simbolismos mayas

La Orquesta Filarmónica Mexiquense agregó a su repertorio “La Noche de los Mayas”, pieza que forma parte ya de su repertorio y que fue interpretada en el Festival del Quinto Sol.

La directora de la filarmónica, Gabriela Díaz Alatriste, comentó que dicha pieza en su composición es de origen mexicano y que ha tenido trascendencia internacional, gracias al sonido tan potente que emite.

“Es una fantástica obra de Silvestre Revueltas, única en el repertorio de lo sinfónico porque es una pieza cien por ciento mexicana, cien por ciento universal, con una fuerza increíble y una carga de nuestra propia cultura y de nuestros ancestros”, comentó.

Foto: Especial

Filarmónica Mexiquense integra pieza con simbolismos mayas

La obra tiene dos adaptaciones destacadas, en suite y en sinfónica, explicando que tiene una fuerte carga simbólica de la cultura prehispánica, toda vez que tiene una cita real en maya, además de que se acompaña por instrumentos musicales propios de esta cultura, logrando una fusión de sonidos en la que también radica su autenticidad.

“Es la única pieza en su repertorio que tiene una cita real de una melodía maya y parece que se va abrir la tierra. Tiene una sección de instrumentos de percusión de 12 percusionistas e instrumentos indígenas como el tunkul”, dijo Díaz Alatriste.

La pieza tiene una duración aproximada de 30 minutos y requiere, en general, de dos flautas, dos oboes, dos clarinetes, clarinete bajo, dos fagots, cuatro trompetas, dos trombones, tuba, timbales, percusión, además de bongos, caracol, tambor – con lazos, tambor – sin lazos, guiro, huehuetl, tambor indio, sonajas, tam-tam, tom-toms, tumbadora, tumkul en los instrumentos originarios.

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Fue interpretada en el Festival Quinto Sol

Cabe señalar que el primer movimiento se abre como un poderoso ritual, una evocación melancólica de la historia arraigada con una sección media que despierta suavemente. El segundo movimiento es un scherzo danzante, una rusticidad interrumpida por el urbano, la Jarana, que indica tanto una fiesta escandalosa como un tipo de baile mexicano.

Hay una nocturna casi con un interludio central para la flauta y una ligera percusión india basada en una canción de la noche yucateca.

Tras una introducción premonitoria llega el final en un tema fluido y con variaciones.

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