En las empresas, los negocios, las oficinas y en las familias los festejos decembrinos han sido suspendidos a causa de la pandemia y el incremento de los contagios, por lo que la venta de carne también se verá disminuida por lo menos en 50 por ciento en comparación a lo que se vendió en diciembre del año pasado.
Así lo consideró, Javier Reyes Escamilla, presidente de la Unión Ganadera Centro Norte del país, quien además consideró que existe la posibilidad de que haya desabasto, pues la producción para venta se redujo.
Antes de la pandemia, se producía carne para consumo y para venta, pero derivado de los pocos y prácticamente nulos apoyos gubernamentales, la producción se ha reducido sólo a consumo y esto hará que haya menos carne en el mercado.
Las mejores ventas que se tienen en el año son las de diciembre, dijo, ya que los festejos del día 12, las peregrinaciones, Navidad y Año Nuevo son las que dejan mejores ganancias por la cantidad de carne que se consume y el costo en el que se vende, pero este año, definitivamente las ventas serán mucho menores.
“Cada año hacemos proyecciones de ventas y para este último trimestre es cuando consideramos que sean las mayores, pero este año ha sido atípico y tuvimos que hacer modificaciones así que para este periodo ahora no se proyectaron grandes ventas”, dijo.
En cuanto al costo de la carne en general, el líder ganadero consideró que se incrementará cerca de un 15 por ciento, por lo menos, aunque otros años este producto aumenta más; sin embargo, debido a las condiciones económicas actuales, si aumentara más habría aún menos venta.
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