Especialistas en medio ambiente alertaron sobre los efectos de las altas temperaturas en la región de los volcanes que podrían provocar severos daños a los bosques por la proliferación de plagas y los incendios, así como la escasez de agua de deshielo proveniente del Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Jacobo Espinoza Hilario, gerente operativo de la Comisión de Cuenca de los Ríos Amecameca y La Compañía e integrante de colectivos como Guardianes de los Volcanes, advirtió que este año se registraron temperaturas récord en el Valle de México de hasta 35.3 grados centígrados, lo cual afecta la flora y fauna de la región.
Refirió un estudio de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), el cual estimaba que hace 20 años, al menos 30 por ciento de los bosques del Popocatépetl e Iztaccíhuatl se había perdido por la tala clandestina, la fragmentación y el calentamiento global; sin embargo, consideró que actualmente se ha perdido hasta 40 por ciento de la masa forestal en esta zona.
TE SUGERIMOS: Adán Augusto en su visita por Ecatepec destaca escasez de agua y feminicidios
Plagas y falta de agua afecta la zona de los volcanes
En el caso del aumento de la temperatura, explicó, desencadena una serie de desequilibrios, a partir de la carencia de agua, entre los que destacó la proliferación de plagas.
“El agua favorece la producción de savia en los árboles, es decir, fortalece su sistema inmunológico, es como si nosotros nos quedaremos sin defensas en la sangre, estaríamos vulnerables a bacterias o virus, en los árboles si se queda sin savia no puede expulsar a los parásitos que los atacan y al secarse los árboles aumentan los riesgos de incendios”.
Otro efecto en cadena es la disminución de los glaciares en los volcanes, que se presenta desde hace 20 años, tanto por la actividad volcánica como por las altas temperaturas, por lo que varios municipios de la zona que aprovechaban el agua del deshielo se están quedando sin este recurso.
Realizan esfuerzos para combatir la tala
Aunque autoridades, ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios de la zona realizan esfuerzos para preservar los bosques mediante reforestaciones, fumigaciones y campañas para combatir los incendios y la tala clandestina, los efectos de estas acciones son a largo plazo.
En el caso del agua dijo que es necesario que los tres niveles de gobierno trabajen en un plan hídrico que favorezca la filtración de agua a los mantos acuíferos y el saneamiento de los ríos.
Desde 2011 grupos ambientalistas llevan a cabo un plan hídrico con plantas de tratamiento para el riego agrícola, la regularización de pozos y la administración adecuada de santuarios de agua en zonas protegidas.
TAR