El kilo de pollo ha aumentado su costo por lo menos un 30 por ciento en lo que va del año y los incrementos podrían continuar a consecuencia del alza en el precio de los alimentos.
En el mercado, el kilo de pechuga de pollo actualmente está hasta en 80 pesos, cuando hace unos meses se podía todavía comprar en 65, lo que ha ocasionado que la gente deje de comprar.
Guillermina Domínguez, comerciante de pollo desde hace más de 20 años, explicó que el incremento es cíclico pero ahora le han dicho que estos precios difícilmente van a bajar porque las políticas públicas actuales no permiten que haya producción suficiente de granos, que es el principal alimento.
“Si hemos visto que la gente compra menos pollo, hemos bajado la venta como un 20-30 por ciento. La pandemia nos golpeó en los bolsillos a todos y pues si suben los precios, menos van a comprar”.
Guillermina Domínguez
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el pollo en piezas registró un incremento anual de 31 por ciento, lo que significó su mayor incremento desde la primera quincena de febrero de 1997.
Actualmente el precio del kilo de pierna y el muslo se encuentra en 55 pesos, según cifras del Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM).
“El precio del pollo se elevó como resultado del alza de los precios de los principales insumos requeridos en su producción como son alimentos balanceados y energéticos, como la luz y los combustibles”.
Reportó el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP)
NEF
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