La confianza se aprende y la desconfianza también, sin embargo, es necesario comprender que una vez que aprendemos a desconfiar de la pareja es complejo volver a confiar.
La confianza en la relación amorosa es la certeza de que tu pareja no cometerá intencionalmente acciones u omisiones que pueden lastimarte de ningún modo.
Es creer en la persona que el otro es, pensar que sus palabras son congruentes con sus actos, que es posible confiar en su palabra.
Y por supuesto, la confianza es un pilar indispensable en la relación de pareja, es realmente difícil seguir amando a quien no te resulta confiable, una vez que se rompe la confianza es factible permanecer en la relación y experimentar enojo, decepción, miedo, frustración al no poder experimentar seguridad y comodidad en la relación, pero el amor se fractura o termina.
Y vivir cuidando las acciones de la pareja o cuidándose de no ser lastimado es un gran obstáculo para tener un vínculo de calidad.
Es importante distinguir por qué no confías en tu pareja…
¿Es a causa de tu pareja o a causa de ti?
Cuando es resultado de mentiras, infidelidades, falta de compromiso, no cumplir promesas, faltar a la palabra, por la ausencia de respeto en la relación y todo cuanto tenga origen en tu pareja la desconfianza ha surgido a causa de él o ella.
Y si este es el caso, es necesario cuestionarte si realmente deseas y puedes vivir bien al lado de alguien en quien no confías, claro que lo pueden solucionar si se establece un diálogo franco y honesto y se opta por soluciones de fondo para restaurar la confianza, como la psicoterapia de pareja, pero es indispensable la participación activa de tu pareja para mejorar la relación y recuperar o fortalecer la confianza y también es indispensable que seas honesto u honesta contigo y determines si estás dispuesto a volver a confiar, puesto que las consecuencias de lo que ocasiono problemas en su relación puede ser lo que termine con ella, como lo es vivir hipervigilante de tu pareja, dudar de su palabra, espiar su celular, etc.
En este caso, pregúntate: ¿cuáles son las razones que te mantienen viviendo el infierno de la desconfianza? ¿Para que permanecer con alguien en quien no puedes confiar? ¿Quieres dar otra oportunidad a tu relación, entonces, que ke corresponde hacer a cada quien y qué requieren hacer en pareja?
Si desconfías por historias pasadas en tu vida, la relación rota de tus padres, experiencias dolorosas en tus relaciones anteriores o por inseguridad respecto a ti, es claro que esa desconfianza es tuya no derivada de la conducta de tu pareja.
Ante esta situación es claro que el trabajo de reparación del daño te corresponde a ti… La pareja no es quien deba sanar las heridas que aún no has detectado y por lo tanto, elaborado y superado.
Tu pareja puede apoyarte, acompañarte pero eres tú quien debe trabajar en reparar el daño que te han generado otras historias y otras personas en tu vida.
La confianza es básica para una vida plena en lo individual y en pareja… Por lo tanto, encontrar la raíz de la desconfianza es el primer paso para realizar los cambios necesarios para instaurar en tu vida relaciones satisfactorias.
Puedes aprender de las experiencias, tomar tus precauciones para protegerte emocionalmente pero esto no implica congelarte enormemente y no atreverte a amar ni tampoco caer en la credulidad sin límites.
La honestidad requiere madurez, ¿consideras que puedes escuchar y conocer la verdad sin convertirte en la persona en la que no se puede confiar?
En ocasiones. las personas le mienten a sus parejas porque saben de antemano que si dicen la verdad pagarán un precio alto: ley del hielo, indiferencia, aciones pasivo agresivas o incluso que la relación termine, si lo piensan bien sí una relación no puede soportar la verdad la mentira terminará por destruirla, y lo mismo aplica para las personas que integran la relación, si las acciones o las omisiones de la pareja generan dolor, es preferible considerar seriamente continuar en la relación.
El amor, las relaciones de pareja no deberían sufrirse ni ser un campo de batalla en donde no se viva en paz.
Si tienes que cuidarte de tu pareja, ¿Qué puedes esperar de esa persona cuando ya no sea tu pareja?
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Busca de donde proviene la desconfianza, si es por hechos reales analiza que quieres y puedes hacer con esos eventos, si no está sustentada en hechos reales o actuales de tu pareja, entonces te toca sanar tu relación con la confianza en las relaciones, si no lo haces es posible que termines cambiando de pareja, pero aún con fugas geográficas o cambio de personajes eventualmente volverás a desconfiar de una nueva pareja porque no es la persona es tu historia no resuelta.
La pareja debe ser un terreno seguro no un campo de batalla, ya es demasiado tener que cuidarse en otras áreas de la vida y la complejidad de la misma como para vivir con miedo en tu relación de pareja.La desconfianza no es una raíz adecuada para construir una relación plena y feliz.