El 2023 será un año en el que se acentúen los problemas derivados por la sequía.
El cambio climático es sin duda uno de los factores que ha desestabilizado el equilibrio y ha generado un desajuste de pronóstico reservado.
En el año que está a unos días de concluir se tendrá el registro del mes con el promedio de lluvia más bajo a nivel nacional desde 1941, es decir, desde hace 82 años; situación que llama a la reflexión para actuar.
De acuerdo con el Reporte del Clima en México 2023, en el mes de junio de este año el promedio de lluvia fue de 39.2 milímetros, indicador bajo si se toma en cuenta que en el periodo 1991-2020 el promedio fue de 99.8 milímetros; es decir llovió en promedio la tercera parte de lo que venía ocurriendo.
El estudio elaborado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) refiere que en junio se generó la tercera onda de calor que generó un ambiente caluroso e inhibió la generación de lluvias.
La afirmación que alarma es que la onda de calor que afectó a todo el país entre 1 al 22 de junio es la más extensa y severa de los últimos años.
La alerta no debe ser ignorada, tampoco menospreciada, ya que la falta de lluvia ocasiona sequías, aunque hay que aclarar que este año no es el que registra nivel de sequía más severo.
Al respecto la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dio a conocer a través de su sitio web, que las sequías se duplicarán para el año 2050, que se prevé una amenaza latente en la disponibilidad y calidad del agua.
Este organismo también señala que es la sequía una de las mayores amenazas para el desarrollo sostenido y dentro de dentro de tres décadas las sequías afectarán a más de las tres cuartas partes de la población mundial.
Si bien se ha registrado un mes con menos cantidad de lluvia, no es el 2023 el año con registro de mayor afectación por sequía.
El sitio web especializado www.meteored.mx puntualiza que es el año de 2011 el que registra el primer lugar en niveles de sequía; el segundo fue el 2021; el tercero el 2006 y cuatro precisamente en este año que estamos viviendo.
Uno de los puntos en los que impacta el tema de sequía, escasez de agua y poca lluvia es precisamente el almacenamiento de las presas que alimentan el Sistema Cutzamala que abastece del vital líquido a la Zona Metropolitana del Valle de México y Valle de Toluca.
El reporte al pasado 28 de noviembre da a conocer que el almacenamiento de esas tres presas, que son Villa Victoria, Valle de Bravo y El Bosque es de apenas el 41.13 por ciento; su almacenamiento total es de 782 millones 521 mil metros cúbicos y apenas tiene registro de 321 millones 835 mil metros cúbicos.
Los indicadores son de llamar la atención. Son reiteradas las alertas que recibimos por el tema de escasez de agua. Como hemos insistido más que llamadas de atención son llamados a la acción para evitar tiempos por venir más complejos.
@periodistamex