La Secretaría de Salud del Estado de México informó que la bacteria Klebsiella Oxytoca que fue detectada en cuatro hospitales del Estado de México, tres públicos y uno privado, y que ameritó una alerta sanitaria en el país, afectó a 15 menores de edad de entre cero y 14 años de edad, los cuales en su totalidad “presentaban de forma asociada diversas comorbilidades”. El texto señala que la infección del torrente sanguíneo con esta bacteria tiene que ver con una posible “contaminación de nutrición parental”, que es un método de alimentación que se proporciona por medio de una sonda.
Aunque resistente la bacteria, Klebsiella Oxytoca no es un problema de salud
A pesar de que se solicitó una entrevista con algún funcionario de la Secretaría de Salud estatal, la dependencia sólo envió una tarjeta informativa, donde se da cuenta que el 28 de noviembre pasado la Dirección de Información Epidemiológica notificó a la Red Hospitalaria Epidemiológica de la existencia de estos casos. Autoridades sanitarias federales y estatal, como el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), ya realizan una investigación para esclarecer el origen del brote y se mantienen reuniones constantes para reforzar las estrategias de contención y prevenir otro brote similar.
Problema intrahospitalario, sin peligro para la población
Por su parte, Miguel Ángel Karam Calderón, catedrático en la Faculta de Medicina de la UAEMex, en el área de Investigación de Epidemiología Social, explicó que este tipo de bacteria tiene una alta resistencia, por lo que sí es importante darle la atención necesaria, sin embargo, aseguró que al localizar el brote dentro de instituciones de cuatro hospitales, tres públicos y uno privado, es sencillo mantenerlo controlado dentro de estas instalaciones. Es un problema hospitalario que no afectará a la población en general, sentenció.
Indicó que las autoridades sanitarias seguramente ya realizan la investigación para conocer el origen de la bacteria, pero todo apunta a que pueda ser el material que utiliza para alimentación por sonda o suministro de medicamentos u otras sustancias vía intravenosa, lo que coincide con lo dado a conocer por la Secretaría de Salud estatal.
En caso de detectar que la bacteria se encontraba en algunos de este tipo de recursos médicos, es necesario que de inmediato se localice el resto del lote. “La fuente está por ahí, y que lo que hay que averiguar ahora es que este equipo, porque no es solo en un lugar sino ha sido en varios lugares, incluso se reporta en un hospital particular, es muy importante ver cuál es el lote y el fabricante de este tipo de implementos para meter un control inmediato y si es un lote, este lote ya no se utilice y ver con la empresa que lo haya distribuido, qué está ocurriendo”.
Karam Calderón precisó que normalmente las empresas fabricantes tienen procesos muy estrictos con control de calidad, sanitización y el manejo de este tipo de implementos, sin embargo, al tener una alta resistencia, hay que verificar si desarrolló resistencia a estos procesos de purificación.
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