Curiosos, otros un tanto cariñosos y otros si que son especiales, son solo algunas características de los gatos, lo que es un hecho es que demuestran su amor de una u otra forma sin caer en ser cursis.
Hay ocasiones en que suelen ignorar a sus dueños; de seguro te ha pasado que por más que llamas la atención de tu michi no responde ni va a buscarte, aún cuando veas que está a escasos metros de ti.
O si de plano ves que mueve sus orejas cada que te escucha llamarlo.
Te decimos las posibles razones por las que se comporta así.
Problemas de salud
Cuando tu gato te llega a ignorar es porque se siente mal y quiere descansar, deberás estar muy atento a todas las señales y estar listo para una probable vista al veterinario.
También puede ser que debido a su edad ya haya perdido la audición o incluso la vista.
Quiere estar a solas
Así como a nosotros nos gusta alejarnos un de amigos, familia, quizás pasar tiempo a solas viendo una serie, película o escuchando música, los gatos también quiere pasar tiempo a solas.
Pero no te preocupes, en cuanto sienta que necesita un poco de cariño acudirá a ti.
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Estrés
Sabemos que los gatos pueden asustarse con facilidad o estresarse cuando pasan por alguna situación que consideran que puede ponerlos en peligro.
Incluso si llegan al lugar donde viven personas que no conocen y preferirán esconderse, es por eso que al momento de llamarlos ellos probablemente no atiendan a tu llamado.
Esto también dependerá del carácter de tu michi, ya que esto puede que no ocurra si tu mascota es muy extrovertido y social.
Los gatos ignoran por naturaleza
Según una investigación de Atsuko Saito de la Universidad de Tokio y Kazutaka Shinozuka del Colegio de Medicina de la Universidad del Sur de Florida, trabajaron sobre 20 especies de gatos.
Utilizaron grabaciones para cada uno de ellos con su respectivo dueño y cuatro extraños; los especialistas llegaron a la conclusión de que los gatos saben perfectamente que quien les habla es quien comparte su vida con ellos y les alimenta.
Sin embargo, eso no quiere decir que no se molesten en lo más mínimo en demostrar que allí estamos dándoles órdenes, sino todo lo contrario.
Los gatos no sólo son más autónomos que los perros, sino que además tienen una capacidad innata que les permite ignorar a su amo cuando lo escuchan.
Algo que para los canes resulta sencillamente irresistible.