Urgente el cambio en el Estado de México

El Estado de México es la entidad más poblada del país. 18 millones de personas la habitamos. La Ciudad de México tiene la mitad, 9 millones de personas. 

Con 125 municipios, el padrón electoral es de un poco más de 12 millones de electores. Contamos con los municipios más poblados de la nación.

El Estado de México esta lleno de problemas; en materia de inseguridad, es terrible la situación. Transporte masivo prácticamente inexistente e ineficiente el poco que tenemos. Vialidades primarias y secundarias de segunda y en mal estado.

Un pésimo sistema de salud. Endeudada la entidad con más de 60 mil millones de pesos. En fin, delicada por no decir grave la condición de los mexiquenses. 

Eso es lo que he encontrado en los foros legislativos que decidimos llevar a cabo en todo el Estado de México. Amén de los temas generales señalados, se suman los de índole local o regional que hacen todavía más difícil la problemática.

Eso es lo que he recogido en los 60 municipios que he visitado. Ya son miles de personas, de todos los rincones del Estado con las que he tenido contacto en estos últimos dos meses. Con la información que ellos me dan y sus puntos de vista, voy actualizando mi conocimiento del Estado de México. 

Por donde quiera que se dan mis visitas, escucho toda esa problemática. Tan solo el recorrer por carreteras, avenidas y calles en esta gira que llevo a cabo, es fácil observar que el Estado, en verdad vive un abandono que no se merece.

Se dice fácil visitar 60 municipios y hablar con miles de personas pero no es así. La realidad es más que impactante y hasta desconcertante. ¿Por qué ha habido tanta indolencia y desatención de los gobiernos en mi Estado?

Un ejemplo que señalo permanentemente en este recorrido es porque en nuestra entidad no tenemos un sistema de transporte masivo como el metro. Si la Ciudad de México con 9 millones de personas lo tiene, porque nosotros con 18 millones no tenemos ni una sola línea de metro. 

Esto es un ejemplo, una sola muestra de que no ha existido atención y preocupación de los gobernantes anteriores por tener un sistema de transporte como el metro. ¿Cómo es posible que en Guadalajara y Monterrey, cuyos estados donde están localizadas esas capitales, y que ninguno rebasa más de 7 millones de personas, tienen metro y el Estado de México con 18 millones, no lo tiene?

¿Quién es el culpable de que los mexiquenses del Valle de México no tengan un sistema de transporte tan necesario como el metro? Tengo que decir que en la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara quienes iniciaron el metro o el sistema de transporte equivalente, fueron gobiernos estatales priistas. O sea, allá hubo gobernadores que siendo del PRI sí se preocuparon por su entidad y en el Estado de México, nadie se decidió hacer lo que los gobiernos priistas hicieron en esas entidades.

Estoy haciendo los foros legislativos para buscar propuestas, para modificar la constitución del Estado y todo el marco legal para que sirva de mejor manera a los mexiquenses. Insistiré en modificar la constitución y las leyes, pero me doy cuenta que aún con el mismo marco legal, si éste se cumpliera y se respetara la Constitución, no surgiría el cambio legislativo que estoy proponiendo. 

Se puede hacer mucho por el Estado de México con la actual legislación. Solo se requiere voluntad. Decisión. Compromiso. Amor al Estado de México. Cosa que no existe, ni ha existido por parte de nuestros gobernantes.

No podemos seguir en el Estado de México por el mismo camino. Necesitamos otro rumbo. Si queremos tener resultados distintos. Hay que hacer cosas distintas. El PRI no las hizo y ya no las podrá hacer.

Morena junto con otros partidos que así lo entienden y, miles de mujeres y hombres sin partido, pero que estén decididos a sumar esfuerzos, pueden y deben lograr el cambio que urge en el Estado de México.

Me anima y fortalece la respuesta de miles de personas que me reciben y escuchan mis mensajes. Entienden que si no desahogamos con soluciones urgentes los problemas que se viven en las grandes concentraciones urbanas, la desesperación de la gente y su hartazgo, puede llevarnos a situaciones que nadie quiere. Que nadie desea.

Por decisión de cientos de compañeras y compañeros de Morena, me toca encabezar este gran movimiento plural en el Estado de México. Lo asumo y lo llevo a cabo con plenitud, consciente de la gigantesca y difícil tarea que significa transformar la entidad mexiquense. Pero el ánimo del que hablaba, que viene de los recibimientos, de la calidez, del entusiasmo y la confianza de la gente que me ha estado recibiendo, fortalece mi fe y mi confianza de que sí podemos, con la experiencia acumulada durante tantos años de mi vida política a nivel estatal y nacional, de estar a la cabeza de este movimiento de aquí a 2023 y más adelante si la gente se decide y si Dios lo permite.

En verdad que es urgente el cambio en el Estado de México. Ver de cerca cómo se vive en Ecatepec, Chimalhuacán, Ixtapaluca, los municipios del Valle de Toluca, del norte y del sur del Estado, apremian nuestro trabajo. Afortunadamente cada día tienen más claridad en la salida que debemos darle al Estado en todos los rubros mencionados. Sabemos por dónde. Sabemos con qué. Tenemos con qué. Lo vamos a lograr, estoy absolutamente convencido.