La zona norte de Toluca es reconocida por la riqueza cultural y vocación artesanal del pueblo otomí asentado en este territorio; sin embargo, en los últimos meses ha acaparado los titulares de nota roja, por los actos delictivos registrados.
De julio a octubre de este año, los medios de comunicación han documentado más de 9 personas asesinadas, que han sido abandonadas entre las milpas y calles de terracería, de comunidades como San Diego Linares, San Cristóbal Huichochitlán, San Diego de los Padres, San Pablo Autopan y San Mateo Otzacatipan.
Entre las víctimas se encuentran 3 mujeres.
El pasado 5 de agosto, en San Pablo Autopan, unos niños que jugaban en una milpa hallaron a un hombre muerto a plena luz del día y en una área habitada.
Las autoridades municipales han declarado que la zona norte ha sido prácticamente el “tiradero” de cadáveres de personas que no son asesinadas en esta demarcación.
“Son personas que han sido ejecutadas, lamentablemente, en otro lugar y los tiran, déjenme decirlo, se oye mal, en el municipio, sobre todo en el norte”, dijo el director de Seguridad Pública de Toluca, Francisco García Burgos.
Por su parte, el alcalde Juan Rodolfo Sánchez Gómez, declaró que este tipo de hallazgos “son situaciones excepcionales, raras”, que corresponde atender a los gobiernos federal y estatal, aunque, dijo, en la zona norte no se ha percibido la presencia de algún cártel.
“Se trata de circunstancias que rebasan capacidades y competencias del gobierno municipal”, declaró Sánchez Gómez.
Mientras tanto, algunos lugareños consideran que también es un “refugio de delincuentes”, que aprovechan la poca vigilancia policíaca, las calles solitarias y el deficiente alumbrado público para cometer sus fechorías.
Entre las víctimas se encuentra Alondra, estudiante y deportista, de 17 años, que tras ser asesinada fue abandonada cerca de una zanja en la comunidad de San Diego Linares, el pasado 4 de octubre.
El día del hallazgo, los vecinos reprocharon al gobierno municipal su responsabilidad en este tipo de acontecimientos y su abandono, que los ha dejado en un estado de indefensión ante los criminales.
“Aquí todas las lámparas están apagadas, no prenden ni una y la calle está oscura. Tanta basura que vienen a tirar, ya no sabemos ni que vienen a dejar”, refirió una de las vecinas.
“Hablamos con la delegada de San Diego Linares, le preguntamos qué pasó con las patrullas de la calle y nos dijo que ya no van a venir hasta que les paguen, porque no les han pagado”, añadió otra de las lugareñas, que prefirió el anonimato.
Tres días antes de este feminicidio, Guillermo, un estudiante de secundaria, de 14 años, fue asesinado con arma blanca mientras su novia, de la misma edad, era violada, en San Diego de Los Padres Cuexcontitlán.
En esa misma zona, días antes, fue abandonado el cadáver de un hombre de aproximadamente 60 años.
Además, la zona norte de Toluca es la que presenta la mayor incidencia de violencia familiar de todo el municipio, tal como ha reconocido el director de Seguridad Pública.
El regidor Arturo Chavarria informó que la mayoría de las 420 calles que requieren atención prioritaria están ubicadas principalmente al norte del municipio, en delegaciones como San Cristóbal Huichochitlán, San Pablo Autopan, San Mateo Otzacatipan, San Andrés Cuexcontitlán y San Lorenzo Tepaltitlán.
En los primeros 8 meses del año, se han iniciado 44 carpetas de investigación por homicidios ocurridos en Toluca, y julio ha sido el mes con mayor incidencia según la base de datos del Semáforo Delictivo.
SPM
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